La escalada de tensión en Francia va en aumento. El museo del Louvre y el Palacio de Versalles han sido desalojado este sábado ante el temor de que se produzca un atentado en las próximas horas.

Las autoridades galas han redoblado la seguridad y ha aumentado los militares desplegados en el país hasta los 7.000 efectivos dedicados exclusivamente a parar ataques terroristas.

El museo ha comunicado que en las últimas horas ha recibido amenazas por escrito. Por esta razón la dirección de la pinacoteca ha decidido clausurar este sábado el espacio.

Este viernes se ha produjo un apuñalamiento en un instituto de la ciudad francesa de Arrás (al norte del país) que ha dejado un profesor muerto y otros dos heridos.

Jornada de huelgas

En la jornada del viernes se convocaron más de 200 acciones por los sindicatos franceses en todo el país, con pocos paros, en la jornada elegida por las centrales europeas para una movilización por los salarios, contra la austeridad y en favor de la igualdad entre hombres y mujeres.

La que más desajustes provocó fue la de los controladores aéreos que ya ha conducido a la cancelación preventiva del 40 % de los vuelos en el aeropuerto parisino de Orly, así como al 20 % en el de Marsella y al 15 % en el de Beauvais.

Las perturbaciones en los ferrocarriles fueron limitadas, y a afectaron algunas líneas regionales y de cercanías de París, pero no a los trenes de alta velocidad (TGV).