El pasado lunes 26 de junio, el presidente de la Federación Rusa, Vladimir Putin, ha vuelto a dirigirse a la población rusa con un claro mensaje para restituir su dañado liderazgo tras el motín organizado por el jefe del Grupo Wagner, Yevgueni Prigozhin.

La rebelión estaba abocada al fracaso. Cualquier chantaje e intento de organizar un motín interno acabará en derrota” ha sido uno de las declaraciones más destacadas del discurso del presidente. Aunque perdona a los mercenarios de Wagner que no hayan participado en el levantamiento, no espera el mismo destino a los líderes del grupo. 

Asimismo, en un mensaje corto pero contundente en un momento de gran incertidumbre debido a la invasión rusa de Ucrania, Putin ha seleccionado con cuidado las palabras de su intervención. De esta manera, muchos se preguntarán: ¿qué es “myatezh”, la palabra clave del discurso de Vladimir Putin?

¿Qué significa “myatezh”, la palabra clave del discurso de Vladimir Putin?

Mятеж (myatezh) traducido del ruso significa rebelión o revuelta. Viene originalmente de la palabra soena mětež, que significa desorden y confusión. Y esta palabra, que se repite en numerosas ocasiones en el discurso de Putin, ha sido seleccionada con una intención muy marcada. 

Los diccionarios rusos explican la palabra como “rebelión armada como resultado de un complot contra la autoridad estatal existente". Pero en la historia de Rusia, esta palabra siempre se ha utilizado para describir el periodo de conflicto justo antes de comenzar una guerra civil. Una correlación que quiere dejar claro el presidente ruso. 

Las guerras civiles de Rusia, empezando desde la época de los zares hasta la de URSS, siempre han ido acompañadas por mucha sangre. Otro de los elementos muy gráficos que emplea Putin en su discurso al hablar de evitar de que el país “se ahogue en la sangre” del enfrentamiento. 

Por si eso no era suficiente para que el ciudadano entienda la gravedad que supondría una guerra civil en estos momentos de incertidumbre, el presidente va un paso más allá. “Bratoubiystvo”, que significa fratricidio o acción de matar a tu hermano, es otro de los recursos muy frecuente en el discurso de Putin. 

Se trata de palabras calculadas que le recuerden a la población rusa las consecuencias que tendría un conflicto civil en estos tiempos tan delicados por “la amenaza constante en el exterior” del país. Un acto que el presidente califica de “traición” y que supone un castigo igual de grave. 

El futuro del grupo Wagner

Aunque el líder ruso prometió a los mercenarios de Wagner una posible incorporación al Ejército ruso o su establecimiento en Bielorrusia, el perdón no se extiende a los líderes del grupo.

No ha mencionado directamente al jefe de Wagner, Yevgueni Prigozhin, pero no dejó duda que los organizadores del motín “responderán por sus acciones” al considerarse como “actividad criminal dirigida a debilitar el país”.

De hecho, el artículo 279 del Código Penal de Rusia incluye un apartado sobre la rebelión armada. "La organización de una rebelión armada o la participación activa en ella con el fin de derrocar o cambiar por la fuerza el orden constitucional de la Federación de Rusia o violar la integridad territorial de la Federación de Rusia se castigará con la privación de libertad por un período de 12 a 20 años", especifica. 

El discurso de Vladimir Putin llegó ante la duda sobre el futuro del grupo Wagner tras las negociaciones con Bielorusia y la posterior retirada de la organización. En menos de 6 minutos, el presidente atajó cualquier tipo de confusión con el fin de restablecer su figura de autoridad en el país.