El nuevo candidato a presidir el “Govern de la Generalitat” es un supremacista de la peor especie, un esencialista romántico que tiene como único objetivo construir una nación política excluyente en torno a la lengua catalana y que detenta un fuerte sentimiento de superioridad hacia los “espanyols”, a los que considera forman parte de una casta inferior.

Quim Torra es un alumno aventajado de Heribert Barrera, racista conocido y reconocido, que expresaba sin tapujos la ideología supremacista, con frases como: «En América, los negros tienen un coeficiente inferior al de los blancos», «se debería esterilizar a los débiles mentales de origen genético». Posteriormente entrevistado en El Periódico de Catalunya, manifestó que «antes hay que salvar a Cataluña que a la democracia» y que «el bilingüismo implica la desaparición de Cataluña como nación»,

No olvidemos el discurso supremacista del dirigente republicano Oriol Junqueras al que aleccionó en el supremacismo de la raza catalana frente a otras: “Hay una distribución genética en la población catalana estadísticamente diferente a la de la población subsahariana, por ejemplo. Aunque no sea políticamente correcto decirlo, hay muchas características que vienen determinadas genéticamente, y probablemente la inteligencia es una de ellas”

Detenta un fuerte sentimiento de superioridad hacia los “espanyols”, a los que considera una casta inferior

Quim Torra ha destacado como propagandista del nacionalismo hegeliano, promotor de la más soez ideología totalitaria, irracional, historicista, antiliberal y enemigo de las sociedades abiertas que configuran el mundo libre. Es un destacado propagandista del gran “conducator” catalán, Jordi Pujol, cuya sombra sigue siendo muy alargada, y cuya herencia sigue impregnando los discursos en Catalunya.

Conviene recordar, ahora y aquí, las palabras que el molt honorable president Pujol, dedicó a los andaluces: “El hombre andaluz no es un hombre coherente, es un hombre anárquico. Es un hombre destruido (…) es, generalmente, un hombre poco hecho, un hombre que hace cientos de años que pasa hambre y vive en un estado de ignorancia y de miseria cultural, mental y espiritual. Es un hombre desarraigado, incapaz de tener un sentido poco amplio de comunidad. A menudo da pruebas de una excelente madera humana, pero de entrada constituye la muestra de menor valor social y espiritual de España”.

Quim Torra es un perfecto heredero de la ideología supremacista de Pujol

Quim Torra, el personaje escogido por Puigdemont, es un perfecto heredero de la ideología supremacista de Pujol, Barrera o Junqueras; cuya elección tiene un claro viso provocador y de señalamiento hacia los catalanes libres de nacionalismo. Sus mensajes de odio en las redes sociales son dignos de análisis en alguna facultad de psiquiatría, indignos de una persona que pueda dirigir una comunidad autónoma, y que ni siquiera debería presidir la comunidad de una escalera de vecinos. Como muestra las capturas de pantalla que durante los últimos años se han recogido de tan singular personaje, se sintetizan en seis tweets, borrados por vergüenza, pero que nunca se desdijo de ellos:

“Los catalanes votamos y los españoles vienen a vigilarnos. Fuera de aquí de una vez. Iros y dejarnos vivir en paz. Fuera españolazos”.

“Franceses y españoles comparten la misma concepción aniquiladora de las naciones”

“Señores, si seguimos aquí algunos años más, corremos el riesgo de acabar tan locos como los mismos españoles”.

“El fascismo de los españoles que viven en Cataluña, es infinitamente patéticos, repulsivo y borde”.

“Nosotros vamos en coches particulares y nos lo pagamos todo, no hacemos como los españoles”.

“Vergüenza es una palabra que los españoles hace siglos que no han eliminado de su diccionario”

Abogado gerundense, editor y agitador “cultural”; cercano ideológicamente a la CUP y al president “carlista” Puigdemont, fue dirigente durante años de la organización “Ómnium Cultural” (no olvidemos que fue fundada por excombatientes franquistas en los años 60) y candidato derrotado en la única elección a la que se presentó, perdiendo frente al “presunto delincuente” Jordi Sánchez, la entidad agitadora de las turbulentas aguas putrefactas del oasis catalán, la llamada Asamblea Nacional Catalana.

Para entender la magnitud de la tragedia que se abate sobre los catalanes (y a todos los españoles), en esta comedia digna de un autor gañán y capaz del mayor de los absurdos, es ver como todos los actores escogidos para protagonizar esta comedia de enredo llamada Procès, suelen ser personajes fracasados, sin más méritos que su radicalidad y su discurso xenófobo.

Todos los actores escogidos suelen ser personajes fracasados, sin más méritos que su radicalidad y su discurso xenófobo

Hay que recordar cómo se escogió a Jordi Sánchez como presidente de la ANC, asociación que ha representado en los últimos años el principal instrumento de agitación supremacista en Cataluña. En las elecciones internas para elegir sustituto de Carme Forcadell, se enfrentaron un total de seis candidatos para dirigir la organización. Un tremendo fiasco democrático resultó la elección, pues la candidata ganadora fue considerada poco apta para dirigir la organización.

Liz Castro obtuvo 4.071 votos, superando al que entonces dirigía la ANC, Jordi Sánchez, que obtuvo 4.005, quedando por detrás el exdiputado de la CUP, Antonio Baños (3.752), y en cuarto lugar Quim Torra, con 3.705. La falta de cuajo de la ganadora provocó las presiones de los políticos que descabalgaron de la presidencia a la escritora yankee y nombraron de nuevo al ínclito Sánchez. Torra fracasó en su intento de liderar la ANC.

Candidato propuesto por Puigdemont, en el número 11 de la lista por Barcelona de la coalición de Junts per Catalunya (JxCat) para las elecciones al Parlamento de Cataluña de diciembre de 2017, ha sido ungido candidato al puesto número 131 a la presidencia de la Generalitat por el dedo del “presidente en el exilio”. Alejado del “mainstream catalanista”, enfrentado al sector business friendly que encabeza Marta Pascal y que todavía ejerce de referente Artur Mas, su presidencia significará un continuo conflicto con “España” hasta la convocatoria (más pronto que tarde) de unas nuevas elecciones legitimistas para escoger a un nuevo presidente de la Generalitat.

El relato supremacista volverá a triunfar mientras sigan conservando los medios de comunicación públicos y la capacidad de subvencionar a los privados

Y el relato supremacista volverá a triunfar mientras sigan conservando los medios de comunicación públicos y la capacidad de seguir regando con generosas subvenciones a los medios privados. No olvidemos que todo se trata de un cuento de buenos y malos, con cientos de millones de euros públicos centrados en la propaganda.

“Kim Jong Un”es el líder supremo de la República Popular Democrática de Corea (RPDC), conocida comúnmente como Corea del Norte.

“Kim Torra Un” es el líder supremacista de la “República Popular democrática de Catalunya”, conocida comúnmente como Generalitat de Catalunya.

 

Josep Ramón Bosch es fundador de Sociedad Civil Catalana