Quizá pueda el PNV votar que sí a una sesión de investidura de Alberto Núñez Feijóo, pero a continuación desmarcarse de toda votación conjunta en la que esté  involucrada Vox a menos que sea una ampliación del Cupo vasco y cosas así que se me hacen totalmente inverosímiles. 

Ya hemos dicho en varios artículos que las elecciones del año que viene son de una importancia capital para el partido nacionalista vasco y todo lo que suponga que los de EH Bildu les puedan reprochar haber pactado con la ultraderecha les puede poner los pelos de punta porque el PNV se juega muchísimo en esas elecciones territoriales,

Por lo tanto, de ninguna manera  se la van a jugar en una sesión de investidura que les da lo mismo porque no tienen nada que perder ahí, salvo que las cosas queden como están, que ya es mucho decir. 

Porque el nuevo Estatuto vasco es cosa del PNV, como lo es lo de la nueva distribución territorial de España, con la vista puesta en la anexión de Navarra, naturalmente, cosa que comparten con EH Bildu. 

Ambos partidos se sienten cojos sin Navarra, cuna del carlismo más irredento y cuna también de los partidos nacionalistas vascos, incluida Bildu, ahora blanqueada por obra y gracia del PSOE pero cuyos orígenes siniestros algunos no podemos olvidar por más que Pablo Iglesias los haya invitado “a decidir “los asuntos del Estado”, cosa que sucedió a la altura de noviembre de 2020 cuando Arnaldo Otegi avanzó que apoyaría los Presupuestos Generales del Estado del año siguiente.

Lo de apoyarse en Vox es una estratagema que les viene muy bien para parapetarse detrás de ella y decir que con la ultraderecha no pactarán jamás

Para entonces el PNV ya miraba con atención los movimientos de Bildu porque se iniciaba el despegue del blanqueo del partido proetarra por parte del PSOE. A partir de ahí se han sucedido los acontecimientos y Bildu es, dentro de los partidos independentistas, el único que ha comprometido públicamente sus votos para una sesión de investidura de Pedro Sánchez.

Por eso es del todo imposible que el Partido Nacionalista Vasco vote 'Sí' a una sesión de investidura de Alberto Núñez Feijóo. Casi diría yo que lo de apoyarse en Vox es una estratagema que les viene muy bien para parapetarse detrás de ella y decir que con la ultraderecha no pactarán jamás. 

Pero sus miembros son la derecha más tradicional de cuantas colorean el panorama político español, de eso no puede caber ninguna duda. Si no fuera por la superación de la España autonómica y por la anulación de los privilegios -eso sí, parcialmente constitucionalizados- con que cuenta el País Vasco, el PNV no se distinguiría de Vox,sobre todo en los modos y en las actitudes.  Pero de ahí a pactar con Vox es un trayecto que los  jeltzales no están dispuestos a recorrer.

El PNV es la derecha vasca y EH Bildu es la izquierda vasca. Luego están la derecha española que es el PP y la izquierda española, que es el PSOE más los partidos que le cuelgan al PSOE a su izquierda y que sirven para no votar al PSOE directamente por una cuestión de mohínes .

Creo que Elías Bendodo va a ser el encargado de hacer las gestiones para convencer a la cúpula del PNV de que vote SI a la investidura de Nuñez Feijóo. Pero puede que lo sea también Esteban González Pons. En cualquier caso no les arriendo a ninguno de ellos la ganancia.

Pero algo hemos mejorado en estos días. De no querer ni ver a los populares, a aceptar una interlocución, aunque sea para que el señor Nuñez Feijóo y el señor Aitor Esteban se conozcan, ya digo que está bien porque lo otro, eso de negarse a ni siquiera entablar algún tipo de contacto era una descortesía evidente.

Pero creo que no van a sacar nada de ese caldero que está vacío. Otra cosa sería que no hubiera elecciones el año que viene y que EH Bildu no estuviera a punto de sobrepasar al PNV.

Pero las cosas son como son, no como nos gustaría que fueran.