El Consejo Ciudadano Estatal de Podemos se reúne este sábado para comenzar a detallar la organización de la segunda Asamblea Ciudadana Estatal, una cita a la que la dirección llega dividida respecto a las reglas que debe tener ese congreso de febrero y al proyecto político que debe asumir el partido en su nueva fase. Aunque el debate político aún no ha arrancado y se remite a más adelante, el diseño de Vistalegre II ya ha hecho relucir importantes discrepancias entre las tres principales familias del partido morado y ha puesto de manifiesto las preferencias de los distintos miembros de la dirección.

Los afines al secretario general, Pablo Iglesias --los 'pablistas'--, los partidarios del secretario Político, Íñigo Errejón --los 'errejonistas'-- y los anticapitalistas --que en este órgano de unas 75 personas cuentan únicamente con cuatro representantes--, tienen la misión este sábado de detallar el modo en el que se organizará la asamblea. Eso sí, las reglas de votación y el formato del debate se definirán en la consulta a la militancia convocada por el líder 'morado', que se celebrará entre el domingo y el martes.

Creo que nos vamos poner de acuerdo en todo", asegura Iglesias antes del consejo

"Creo que hoy nos vamos a poner de acuerdo en todo", ha asegurado Iglesias en declaraciones a los periodistas antes de la reunión. El líder de Podemos ha señalado que es una "posibilidad plausible" que la reunión nombre un equipo técnico en el que haya representantes de todas las corrientes del partido. Además, ha señalado  que el consejo de hoy es "casi histórico" y que en él se analizará la coyuntura política del Gobierno del PP "apoyado" por PSOE y Ciudadanos, y se seguirá definiendo el papel de oposición social, con el trabajo en el Parlamento y en la sociedad civil. Tras asegurar que hay que ser "autocríticos" y reconocer que se equivocaron en la primera asamblea en la manera de elección, ha subrayado que es fundamental "volver a dar la palabra a los inscritos" para que tomen decisiones.

Precisamente la convocatoria de esta consulta ha servido para poner sobre la mesa las diferencias de unos y otros, convirtiendo los asuntos técnicos que se dirimen en ella en un debate político sobre el grado de democratización e integración de la diversidad que quiere cada corriente.

Los 'errejonistas', que aseguran contar con mayoría en el Consejo Ciudadano, han interpretado la decisión de convocar esta consulta como un intento de Iglesias de asegurarse el control de diseño de Vistalegre, al ser consciente del peso que su figura tiene entre las bases del partido y de que, cada vez que se ha implicado en una consulta, ha ganado por amplia mayoría.

Un equilibrio inestable

Aún así, el equilibrio de fuerzas en el máximo órgano de dirección entre asambleas de Podemos es difícil de medir ya que algunos de sus miembros han dejado de asistir a las reuniones, que se celebran aproximadamente cada tres meses, pero sin dejar constancia pública de ello. Además, algunos de los que sí han anunciado su salida, como el exfiscal anticorrupción Carlos Jiménez Villarejo, que dejó el partido hace casi un año, sigue figurando en el organigrama que consta en la página web del partido.

Si bien el partido morado asegura que son unos 75 los miembros de la dirección que participan activamente --entre los que se incluyen los 17 secretarios generales autonómicos--, en el último acta hecha pública por el partido, recogida por Europa Press y correspondiente a la reunión del 3 de enero de 2016 (hace casi un año), sólo firmaron 54 asistentes.

Entre los partidarios de Iglesias que participan activamente figuran, por ejemplo, nueve de los secretarios generales autonómicos --como el de Aragón, que también es secretario de Organización, Pablo Echenique, y el de Madrid, Ramón Espinar-- y dirigentes como Rafael Mayoral (Sociedad Civil), Irene Montero (Gabinete de Iglesias), Carolina Bescansa (Programas), Jesús Montero (Podemos Madrid ciudad), o Juanma del Olmo.

Por su parte, Errejón cuenta con el apoyo a sus tesis de tres líderes regionales --el valenciano, Antonio Montiel; el de Murcia, Óscar Urralburu; y la del País Vasco, Nagua Alba-- y dirigentes como Auxiliadora Honorato (Acción Institucional), Clara Serra (Igualdad), Pablo Bustinduy (Internacional), Àngela Ballester (Coordinación), Eduardo Maura (Cultura) o Rita Maestre (portavoz del Ayuntamiento de Madrid).

Estos dos sectores llegan a esta fecha con sus diferencias más aireadas que nunca debido al ambiente precongresual en el que se ha ido sumiendo cada vez más el partido una vez despejada la incógnita del Gobierno. Las tensiones se han disparando con la definición de la fecha de la asamblea y la convocatoria de la consulta a la militancia por parte del secretario general.

Los equipos técnicos

Aún así, Iglesias prevé una reunión tranquila, que se centre en los detalles técnicos sobre el modo de organizar el congreso, y el equipo o los equipos técnicos que es preciso nombrar para delegar en ellos las diferentes tareas a abordar.

Los dirigentes también tendrán que refrendar la fecha para celebrar la asamblea presencial propuesta por Iglesias: el 11 y 12 de febrero, coincidiendo con el congreso del PP. Aunque los 'errejonistas' ven un acierto esa elección, consideran, eso sí, que la fecha tendría que haber salido del Consejo Ciudadano, que se reúne dos semanas después del anuncio del líder.

Eso sí, el encuentro, que tendrá lugar a partir de las 11.00 horas en la sede estatal del partido de la calle Princesa de Madrid, comenzará, como es habitual, con la exposición por parte de Iglesias de su informe sobre la situación política en la que, previsiblemente, hará balance sobre la actividad de Podemos los últimos meses, analizará la actualidad política, y esbozará el rumbo que, a su juicio, debe seguir el partido.