La propuesta pasó desapercibida en mitad del conflicto independentista. No era más que una iniciativa que afectaba de modo muy puntual al reglamento de la Cámara Baja y la atención mediática no estaba puesta en ella. Pero podría haber tenido una enorme repercusión posterior, porque lo que presentaron todos los grupos del Congreso, desde el PP y Ciudadanos a ERC, fue abrir el supuesto de votación telemática desde el extranjero, lo que, sin duda, hubiera sido utilizado por el prófugo Carles Puigdemont como argumento para defender su derecho a votar cómodamente instalado en Bruselas.

Cuando la proposición de ley se acordó el 29 de septiembre pasado nadie podía prever  los acontecimientos posteriores que derivaron en una huida de Puigdemont y de cuatro consejeros destituidos del gobierno de la Generalitat. Pero entonces ya se habían celebrado los polémicos plenos de los días 6 y 7 de ese mes en que se aprobaron las llamadas "leyes de desconexión", esto es, la ley electoral y la de transitoriedad jurídica.

Fue en ese contexto que Partido Popular, PSOE, Unidos Podemos, Ciudadanos, ERC, PNV y Grupo Mixto, en fin toda la Cámara, pidieron reformar el artículo 82 del Reglamento para ampliar los supuestos de voto telemático.

Los grupos parlamentarios defendían la imposibilidad de votar si estaban de visita en una Cámara Parlamentaria Internacional

Bien es cierto que el argumento esgrimido en esa proposición se circunscribía a la presencia de representantes de las Cortes Generales en Asambleas Parlamentarias Internacionales,viajes que son frecuentes, y se pedía por tanto la posibilidad del voto a distancia cuando dicha participación “impida la asistencia a la votación en la sesión plenaria, siempre que dicha participación haya sido autorizada por la Mesa” del Congreso, según reza el texto de la propuesta.

En la exposición de motivos, los grupos argumentaban que la presencia de diputados en las Asambleas Parlamentarias Internacionales "garantiza que la ciudadanía española esté también representada en estos foros parlamentarios y hace posible la participación institucional de las Cámaras en la dimensión internacional". Y justificaban que la posibilidad de que los miembros de las delegaciones puedan hacer uso del procedimiento de voto telemático en estas situaciones "permitiría no solo reducir los gastos asociados a la organización de las Asambleas, sino apuntalar el adecuado cumplimiento de las funciones de representación internacional en organismos internacionales", participación, agregaban en su proposición de Ley, que atiende "siempre a los criterios de eficiencia y economía que rigen la programación y ejecución del gasto público, evitando la generación de gastos excesivos", reiteraban.

Argumentaban que el voto telemático evitaba la "generación de gastos excesivos"

La presidenta de la Cámara, Ana Pastor, -que este año ha tenido que apagar no pocos "incendios" en la Cámara, como el que muchos miércoles montaba el portavoz adjunto de ERC, Gabriel Rufián-, expresó su disconformidad con la misma, por entender que “el ejercicio de la representatividad se debe ejercer en sede parlamentaria”, explican fuentes conocedoras de aquel debate. Esas palabras resultan providenciales ahora y no porque el reglamento del congreso sea de aplicación en el Parlament catalán, pero sí porque podría haber sido usado de coartada para defender el voto telemático de Puigdemont.

De hecho, el ex president y el resto de los huidos, exploraron todas las vías posibles, también la del voto delegado, aunque, finalmente, desistieron de participar en la votación para la constitución de la mesa de la Cámara autonómica. Porque si bien es cierto que una reforma del Reglamento del Congreso no es de aplicación al Parlament, "hubiera dado un argumento al independentismo para intentar forzar esa modalidad de voto".

Excepciones

Actualmente, los supuestos de voto telemático están muy tasados. El artículo 82 del Reglamento de la Cámara, establece que  la votación podrá ser por asentimiento a propuesta de la Presidencia del Congreso, ordinaria, pública por llamamiento o secreta. Pero se añadió un quinto supuesto para los casos de embarazo, maternidad, paternidad o enfermedad grave en que, "por impedir el desempeño de la función parlamentaria y atendidas las especiales circunstancias, se considere suficientemente justificado".

La cuestión está tan controlada que debe cursar la solicitud por escrito a la Mesa, quien a su vez le precisará, las votaciones y el periodo de tiempo en el que podrá emitir el voto mediante dicho procedimiento. Además una vez emitido por este procedimiento "deberá ser verificado"  y obrará en poder de la Presidencia de la Cámara con carácter previo al inicio de la votación correspondiente.