El candidato del PP a la presidencia del Gobierno, Pablo Casado, no ha podido entrar en la jefatura Superior de Policía de Cataluña a pesar de tener permiso de la Delegación del Gobierno, según la versión de los populares. Casado se ha desplazado a Barcelona -como ha hecho hoy también el presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez-, para apoyar a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado que han intentado restablecer el orden público en las principales ciudades catalanas en los actos convocados estos días por el "Tsunami democrático" y los llamados CDR.

Sin embargo, "cuando hemos llegado no nos han permitido la entrada", ni siquiera, dice una de las personas que acompañaba al líder del PP saludar a los agentes de policía que se encontraban en el exterior del edificio, uno de los más acosados estos días por los violentos.

El argumento que les han dado es que estaba ausente el comisario jefe, "pero la culpa no es de la policía. Ellos reciben órdenes", han comentado los mismos medios que responsabiliza a la misma Delegación del Gobierno, que depende del Ministerio de la Presidencia, de haber dado órdenes en sentido contrario. En todo caso, los populares eran conscientes de las dificultades que entrañaba esta visita, porque hasta Pablo Casado, horas antes en un desayuno informativo de Europa Press, daba por hecho que no les iban a dejar acceder porque "querrá entrar él", en alusión a Sánchez.

Lo cierto es que Sánchez ha tenido que sufrir la presión de los independentistas en el hospital donde atienden a los policías heridos en los graves distrubios de estos días y dejado de visitar la Delegación del Gobierno a donde se había trasladado los del "Tsunami democrático".

Casado ha subrayado, en declaraciones a los periodistas que "no cabe apelación al diálogo sino a la concordia, no cabe apelación a la negociación, sino a la ley y al orden". Asimismo ha reclamado al Ejecutivo que ponga en marcha las medidas legislativas necesarias para que los policías tengan medios materiales suficientes con los que ejercer su trabajo, por entender que ha fallado la dotación de los cuerpos policiales así como la coordinación.

Encuentro con empresarios y comerciantes

Tras el "portazo" de la jefatura, Casado, que iba acompañado del presidente de los populares catalanes, Alejandro Fernández, ha organizado un encuentro con comerciantes y empresarios afectados por las movilizaciones de estos días. El presidente del PP ha estimado en 1.033 millones la pérdida de actividad en Cataluña, entre ellos, por ejemplo, los 24 millones que le ha costado a la Seat cerrar un día su planta de Martorell, según datos de la misma empresa.

Por la tarde, Casado participará en una reunión de la Junta Directiva del PP catalán. Sólo en Barcelona, los populares esperan sacar dos diputados -el 28 de abril pasado sólo salió el escaso de Cayetana Álvarez de Toledo- y empatar con Ciudadanos en esta circunscripción.