Estalla Podemos. La formación morada se ha visto implicada en un tremendo escándalo justo en el momento en el que negocia su entrada en el gobierno de coalición. Sobre la mesa está el testimonio de dos exabogados, que acusan al partido de ocultar "irregularidades" tanto financieras como en algunos procesos de primarias.

El origen del terremoto está en el despido fulminante de dos de sus letrados, uno de los cuales era asesor jurídico personal de Pablo Iglesias. La chispa saltó a última hora de este miércoles, al conocerse que Podemos ha expulsado a José Manuel Calvente y Mónica Carmona. Ambos trabajaban para el partido, uno como Delegado de Protección de Datos y la otra como Responsable de Cumplimiento Normativo del partido. Ambos publicaron una carta en la que acusan a la formación de haber sido cesados como «un grave acto de represalia y posibles coacciones». En la misiva aseguran que estaban investigando «graves irregularidades».

El partido de Iglesias guardó silencio tras el bombazo. Y su reacción llegó muchas horas después en forma de ataque y a través de unas declaraciones a Efe. En la mañana de este jueves, un portavoz de Podemos ha desmentido las acusaciones de los abogados. Y ha asegurado que el despido «se ha producido un por acoso sexual y laboral a una trabajadora».

«A raíz de su despido, se ha reordenado el departamento legal. Ninguna de las acusaciones vertidas por esta persona a raíz de su cese tienen ningún fundamento. El partido está valorando las acciones legales pertinentes», aseguran desde Podemos.

La grave acusación de Podemos ha provocado la reacción inmediata del aludido. José Manuel Calvente ha anunciado que se querellará por la vía criminal contra la dirección del partido por «calumnias». El abogado denuncia que la formación está mintiendo sobre las verdaderas causas de su despido.

Ningún responsable del partido ha dado por ahora la cara. Tampoco hay ningún documento sobre la mesa, a excepción de la carta acusadora de los dos abogados. Podemos no ha aportado la carta de despido en la que, supuestamente, debería figurar el acoso sexual como motivo de la medida disciplinaria. Tampoco los despedidos han dado pruebas de las irregularidades internas que denuncian.

Declaraciones del abogado José Manuel Calvente.

Calvente ha reiterado este jueves la versión de la carta firmada junto a la jefa de auditoría. En declaraciones a El Mundo, ha denunciado que el partido está intentando "tapar su corrupción" . "Hemos detectado irregularidades en la protección de datos, han robado un disco duro para averiguar qué sabe del partido, lo cual puede ser un delito de revelación de secretos; querían ceder datos personales a una empresa externa para que se produjera una votación; querían compartir datos ilegalmente con otros partidos; han cedido datos personales a Facebook para la campaña electoral. Todo esto lo tengo denunciado ante la Agencia de Protección de Datos", asevera.

Quien aún no se ha pronunciado más allá de la carta es la jefa de auditoría. Mónica Carmona defiende en la carta publicada el miércoles que «en los últimos meses se han producido una serie de irregularidades muy graves que podrían comprometer seriamente al partido como entidad jurídica desde un punto de vista penal, administrativo y reputacional».

Según explican en su escrito, los abogados habían iniciado «expedientes internos de investigación para aclarar los hechos y defender al partido ante una posible reclamación». La respuesta de la dirección de Podemos ha sido «inventar acusaciones» contra Calvente «para justificar laboralmente su despido» y proponer la sustitución de Carmona «con la excusa de una «reorganización de departamentos».

La investigaciones de los dos abogados han coincidido en el tiempo con la polémica desatada por otra denuncia. El pasado 20 de noviembre se conoció que una ex escolta de Podemos ha demandado a Irene Montero por trato laboral «discriminatorio».

Según informó OkDiario, la empleada de seguridad denunció que la número dos del partido la obligaba «de manera recurrente» a hacer de recadera para la familia fuera de su horario laboral, También de ejercer de mecánica o de chófer para la empleada doméstica, la niñera e, incluso, para familiares invitados a su vivienda.

Entre las tareas concretas que se detallan en la demanda se encuentran la de adquirir «productos de parafarmacia y droguería para bebés e, incluso, llevarle la cena desde varios restaurantes de Madrid hasta su chalet de Galapagar. «Me ordenaba llevarles la cena y la comida a ella, a Pablo y a los perros», reitera la denunciante, que destaca otras labores como «tareas de gestión de obras en una des sus propiedades», «transporte de envíos de familiares» o «mantenimiento de vehículos privados».

La denuncia de la escolta no es la única en materia laboral que sufre la dirección de Podemos. La asistente de Pablo Echenique que trabajó sin contrato, la readmisión en Podemos de un diputado que fue despedido por no ser afín a Pablo Iglesias, o el cese masivo de una treintena de errejonistas tras la Asamblea de Vistalegre II figuran entre los frentes que ha tenido que lidiar el partido que ahora negocia para entrar en el Gobierno de Pedro Sánchez.