El Govern que preside Quim Torra obtiene un suspenso en la valoración de los catalanes. Así lo acredita la encuesta de valoración de políticas públicas que el Centro de Estudios de Opinión (CEO), el Cis catalán, realiza anualmente. Los encuestados valoran con un 4,6 al Govern, un resultado calcado al obtenido el año pasado.

Preguntados sobre la eficacia del ejecutivo, el 61,6% de los consultados afirmó que el Govern no sabe resolver los problemas del pais, casi 8 puntos más que en 2018. Solo el 1,8% considera que el ejecutivo de Torra esté resolviendo ya los problemas catalanes, mientras el 30,6% cree que sabe cómo hacerlo, pero necesita tiepo.

Una respuesta especialmente critica con la gestión del ejecutivo de Torra, que según el director del CEO, Jordi Argelaguet, "responde al momento de bloqueo en Cataluña y España". El trabajo de campo se realizó la segunda quincena de noviembre, tras las elecciones generales y en plena negociación de la investidura de Pedro Sánchez.

"La gente responde a este contexto especial de la investidura" ha argumentado Argelaguet, para quien este resultado refleja "la situación de incerteza sobre nuevas elecciones" en el conjunto de España, así como la división en el Govern "con un socio apostando por apoyar investidura y el otro que no".

Suspenso del constitucionalismo

Sin embargo, casi el 60% de los 1.600 encuestados -entre los se ha preguntado también a residentes sin nacionalidad española- aprueba al ejecutivo catalán. Lo suspenden sin paliativos los votantes Cs, PP y PSC. En el caso de los Comunes y la CUP, una mayoría aprueba al ejecutivo de Torra, pero la media de las puntuaciones entre sus votantes suspende también al Govern.

Por contra, tanto los votantes de JxCat como los de Esquerra aprueban sin dudas al ejecutivo, aunque los votantes neoconvergentes lo hacen con más entusiasmo -un 6,2 de media entre los votantes de Carles Puigdemont, frente al 5,8 que le dan los votantes de Esquerra-.

Los políticos, primera problema

Respecto a los principales problemas identificados por los catalanes, la insatisfacción con la política y la relación Cataluña-España vuelven al primer lugar en el ránking de preocupaciones de los ciudadanos. Superan al paro, identificado como el principal problema en 2018. La sanidad mantiene el cuarto lugar, mientras crece la preocupación sobre la inseguridad ciudadana.

Esos principales problemas, entre los que también destaca el acceso a la vivienda, se corresponden además con las políticas sectoriales en las que los consultados suspenden al Govern. Se trata de las políticas de acceso a la vivienda, lucha contra el paro, funcionamiento de la justicia, temporalidad en los contratos, el apoyo a las empresas, lucha contra las desigualdades, la defensa del autogobierno y el equilibrio de inversiones en toda Cataluña