La zona de Ciudad Universitaria, junto a la Facultad de Ciencias de la Información de la Universidad Complutense, ha amanecido con las consecuencias del macrobotellón que se celebró anoche tras la finalización de los exámenes de la EvAU: coches destrozados, señales de tráfico por los suelos, restos de botellas rotas y vasos y bolsas de plástico esparcidos por el campus.

El personal de limpieza del Ayuntamiento de Madrid se afanaba esta mañana en retirar los restos de basuras y restaurar los numerosos daños ocasionados por los alumnos.

La Policía Municipal de Madrid desplegó un dispositivo formado por 100 agentes, así como drones y sección canina para vigilar la celebración de botellones en los principales campus universitarios (Autónoma, Complutense y Politécnica) por la finalización de la EVAU.

La estrategia se puso en marcha ayer por la tarde y estaba integrado por un centenar de agentes municipales, componentes de la Unidad Integral de Distrito (UID) de Moncloa pero también con la participación de las Unidades Centrales de Seguridad (UCS), de la Sección Canina, de las caballerías del Escuadrón y de la Sección de Drones.

"Los agentes se distribuirán por los campus universitarios para que la celebración trascurra con normalidad", apuntaron ayer fuentes del área de Seguridad y Emergencias, desde donde se ha hecho un llamamiento a la responsabilidad.