El Día Internacional de la Mujer, celebrado el 8 de marzo en numerosos países, constituye una fecha crucial para reflexionar, revindicar y celebrar sobre los avances logrados en la igualdad de género y recordar la fuerte e incesante lucha que ha llevado a cabo la sociedad a lo largo de los siglos.

Este día, además de conmemorar los logros alcanzados, también destaca los desafíos pendientes en términos de derechos y equidad entre hombres y mujeres. Anualmente, miles de personas se movilizan en manifestaciones con pañuelos morados y pancartas que proclaman consignas como a favor de las mujeres.

La violencia de género, la brecha salarial, y los derechos trans y reproductivos continúan siendo obstáculos significativos para el feminismo, especialmente en un contexto global marcado por la amenaza de retroceso en la igualdad.

En el último año, la atención en España se ha centrado en los casos de violencia sexual, resaltados por sentencias como la de Dani Alves y denuncias de actrices contra el cineasta Carlos Vermut.

Origen del Día de la Mujer

Aunque el 8 de marzo es ahora celebrado por mujeres de diversos estatus sociales y económicos, su origen se remonta a las protestas de las trabajadoras estadounidenses durante la Revolución Industrial. Este hecho destaca la naturaleza vinculada entre la lucha feminista y la clase social, ya que las pioneras fueron mujeres de los sectores más precarios de la sociedad.

Algunos teóricos sostienen que Estados Unidos fue la cuna del movimiento feminista, marcado por un evento trágico en 1857, cuando cientos de trabajadoras de una fábrica en Nueva York se manifestaron contra salarios bajos y condiciones laborales inhumanas. La brutal represión policial resultó en la muerte de 120 mujeres, sembrando la semilla de la lucha feminista.

Aunque la fecha exacta de este evento no está confirmada, muchos expertos la sitúan el 8 de marzo, convirtiéndose en un hito crucial. La celebración del Día de la Mujer en Estados Unidos comenzó oficialmente en 1909, inicialmente el 28 de febrero, organizado por el Partido Socialista. En 1910, en la Segunda Conferencia Internacional de Mujeres Socialistas en Copenhague, se estableció el 8 de marzo como el Día Internacional de la Mujer Trabajadora, extendiéndose su conmemoración a varios países.

En 1911, el trágico incendio en la fábrica Triangle Shirtwaist en Nueva York, donde murieron 123 mujeres, impulsó la adopción de la fecha en todo el mundo.

Estos eventos fundamentales vincularon la lucha de las mujeres con la lucha de clase contra el patriarcado y el capitalismo. La ONU conmemoró por primera vez el Día Internacional de la Mujer en 1975, proclamándolo oficialmente dos años después.

Hoy en día, las mujeres continúan el legado de las pioneras del siglo XIX y XX, pero algunas critican la deriva neoliberal y llaman a un feminismo inclusivo que abarque a todas las mujeres, independientemente de su raza, identidad de género, orientación sexual o discapacidad. Como afirman muchas activistas, "el feminismo será de clase o no será".