Un avión de la aerolínea de bajo coste Ryanair.
La Guardia Civil ha desalojado a una pasajera ebria y a su pareja después de que alterase el viaje de todos los pasajeros del vuelo de Ryanair procedente de Londres Stansted con destino Fuerteventura en la mañana del pasado 25 de marzo.
Según relatan algunos testigos, la mujer subió al avión con varias copas de más y, desde que despegó de Londres un poco después de las seis de la mañana, la pareja estuvo incordiando con gritos constantes durante todo el trayecto al resto del pasaje.
Al aterrizar en Canarias, varios agentes de la Guardia Civil trataron de calmar los ánimos de los pasajeros y de la propia turista, pero no lo consiguieron. Tras varios intentos lograron sacar a la fuerza a la mujer entre los aplausos de los pasajeros británicos que elogiaban la labor de las fuerzas de seguridad.
Todavía afectada por el alcohol, la pasajera gritaba que no requería una ambulancia mientras estaba siendo detenida. Ahora, tanto ella como su compañero han sido puestos a disposición judicial.
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