Impartía clases en una pequeña aldea asturiana y sufría el acoso y derribo por parte de sus alumnos. Era de forma tan continuada que llegó a pedir la baja. Pero al verlos fuera de las aulas, el acoso seguía. Esta situación llevó a pedir un receso laboral el pasado mes de marzo, antes de la pandemia del Covid-19 lo que le obligó a dar clases online. Fue entonces cuando volvió a dar clases.

Según informa El Comercio, al estar en remoto sería distinto, pero no fue así. Sus alumnos le ciber acosaron hasta tal punto que no fue capaz de soportar la presión y a finales del curso se quitó la vida. Este caso ilustra el acoso más extremo que contabilizó el Defensor del Profesor, puesto en marcha por el sindicato Anpe en el curso 2019/2020 en Asturias.

"Este caso lamentablemente demuestra que no son ningún tipo de broma las vejaciones y faltas de respeto que reciben los profesores", remarcó Anpe. Frases como "el alumno te pone el lápiz en la garganta y te dice que te va a dar" o "el otro día casi me parte un dedo" y "el padre me esperó a la puerta del gimnasio y me dio un paraguazo en la espalda" muestran la tensión con la que algunos docentes van a sus clases.

Cifras preocupantes

Las cifras ilustran una estabilización "preocupante" para el sindicato, respecto a las 49 atenciones realizadas el curso anterior. De estos 50 casos, 21 se dieron en Secundaria (43%), 19 en Primaria (39%), cinco en ciclos formativos de FP (10%), dos en conservatorios (4%) y dos en Infantil (4%). "Hemos recibido 36 casos de faltas de respeto al profesorado, 21 denuncias de acoso, además de insultos o falsas acusaciones por parte de las familias", detalló la entidad.

Además hay 14 docentes que reconocen que haber tenido problemas para impartir clase. Sin olvidar otros 14 casos de acoso, insultos o falsas acusaciones por parte del alumnado, 8 casos de agresiones físicas y 6 de ciberacoso. Solo seis de estos sucesos han sido comunicados a la Policía Nacional o Guardia Civil. A esto se le añade seis docentes fueron ridiculizados a través de las redes sociales. En tres ocasiones fue necesaria la intervención de un magistrado y un docente sufrió actos vandálicos contra la propiedad: le rayaron su coche.

Desde el año 2006, que se puso en marcha el Defensor del Profesor, han sido 395 los docentes que demandaron atención al servicio por sufrir algún tipo de acoso en sus clases. Algunos profesores están sufriendo dificultades para mantener una docencia de calidad, especialmente durante el periodo de confinamiento. «La atención educativa telemática ha exigido al profesorado un importante esfuerzo y dedicación adicional, que puso en marcha desde la nada y permitió salvar el curso», explicó el presidente de Anpe Asturias, Gumersindo Rodríguez.