El principal detenido en Alicante en la reciente operación contra el blanqueo de capitales de la mafia rusa, Alexey Shirokov, regalaba jamones, vino e incluso joyas a funcionarios, políticos y fuerzas de seguridad para conseguir todo tipo de favores.

Según se indica en el auto judicial de encarcelamiento al que ha tenido acceso Efe, este responsable de la trama había establecido una red clientelar que abarcaba a sectores de la justicia, el poder político y las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado donde él ejercía de conseguidor.

Contaba con "amplios contactos" alcanzados después de cultivar "la amistad y relaciones personales y comerciales con personas del entorno policial, administrativo y político".

Shirokov desplegaba una "efectiva cadena de favores entre sus conocidos" y llevaba a cabo "constantes regalos a todos sus contactos en todos los ámbitos", lo que le ayudó a situarse en un papel clave para que los empresarios rusos "vinculados a la criminalidad organizada ex soviética" pudieran realizar sus inversiones en España "sin ser molestados".

La red de contactos de Shirokov, continúa el auto judicial, le habría permitido incurrir en muchas ocasiones en "posibles delitos de cohecho o tráfico de influencias", además de blanqueo de capitales y "ciertos actos de falsedad documental para proteger dichas operaciones".

Entre los hechos descritos, el auto indica que dentro de la red de contactos con la fuerzas de seguridad "hay ciertas personas que le prestan servicios de naturaleza esencialmente ilegal" como "la aceleración de los trámites de extranjería para sus clientes rusos" y "la identificación de cualquier coche sospechoso que ronde las casas de sus clientes", para lo que se emplearían las bases de datos de la Policía.

Uno de los hechos descritos es una llamada telefónica a un tal Fernando, cuyo móvil pertenece a la Dirección General de la Policía, para pedir ayuda para renovar el DNI de Jesús Ballester, candidato a la alcaldía de Altea por el PP, con quien mantiene "una estrecha relación que incluye la militancia política".

En otra llamada Shirokov comenta a su madre que una multa que le pusieron a su abuelo "va a ser retirada" por la mediación de gente que él conocía "y que lo han resuelto hablando con los de SUMA, el organismo de gestión tributaria" de la provincia de Alicante. Por ese favor, Shirokov regaló "una botella de vino de lujo".

"El nivel de influencia de Alexey Shirokov en la administración pública de Altea y alrededores queda una vez más acreditado", recalca el auto.

En otra llamada, Shirokov habla con un agente de policía, a quien le dice que necesita "alguien que vaya a cobrar las deudas" de la gente que le debe dinero.

El policía le responde que "conoce gente que lo haría por una comisión", a lo que Shirokov responde que podrían quedarse con la mitad de la deuda.

De ello se deduce, según el auto judicial, que Shirokov "pretende contratar policías para que cobren sus deudas por los medios que hagan falta, ofreciéndoles como contraprestación por tan delicado trabajo hasta la mitad de la deuda recuperada".

Más adelante se detalla cómo la aceleración de gestiones de extranjería a sus clientes se logra "mediante el cohecho y el presunto pago de ciertas cantidades económicas a un inspector de Policía" que facilita obtener permisos de residencia "de forma rápida y salvando ciertos escollos".

También se explica una conversación con el apoderado de una asesoría en la que hablan de la solicitud de residencia de un niño extranjero que se halla en España y que acaba de fallecer.

"Ambos convienen en ocultar el fallecimiento del niño para que la madre pueda optar a la residencia en España, lo que constituiría un delito de falsedad documental", según el auto.