Este sábado 16 de diciembre, el Palacio Municipal de Congresos de Ifema se vistió de gala para albergar la 29ª edición de los Premios Forqué. La gala estuvo marcada por la petición del alto al fuego total en Gaza y por el incomprendido humor de los presentadores, Macarena Gómez y Pablo Chiapella.

Es habitual que desde las redes sociales no calen los chistes de los maestros de ceremonia de este tipo de eventos. Sin embargo, en esta ocasión, la falta de conexión era palpable incluso entre los propios actores y directores por la incomodidad que transmitían en pantalla, lejos de la complicidad que se espera que de genere en una gala así.

Hubo tres momentos especialmente emotivos: cuando Ana Guerra cantó Chica Yeyé ataviada con un suntuoso traje rojo para homenajear a Concha Velasco. Otro fue cuando Macarena Gómez recordó la reciente muerte de Itziar Castro. "Lo sentimos todos, fue una mujer muy comprometida con el mundo que le tocó vivir", añadió Chiapella.

En tercer lugar, cuando la pantalla se puso en blanco y negro para que Ana Mena intepretase A tu vera de Lola Flores... delante de su nieta, Elena Furiase, que no pudo evitar romper a llorar. Mientras que los presentadores fueron bastante incomprendidos por el público, hubo un momento que sí llevó a que los asistentes asintieran e incluso a alguna lágrima: el discurso de Paz Padilla para reivindicar a las cómicas.

"Las cómicas estamos en el escalón más bajo en la lista de preferencias machirulas. Sí, señor. Soy cómica, humorista, cuentachistes, titiritera.... y además mujer. Y si encima fuera fea, tendrían que romper la lista por debajo para que yo me metiera", comenzó.

La humorista y presentadora Paz Padilla durante la gala de entrega de la 29 edición de los Forqué. | Europa Press

Después, hizo alusión a aquellos de desprecian su profesión. "Siempre me he identificado como bufón, parece que se actriz es otra cosa. Esto ocurre porque el humor pasa, no se queda en un cuadro o en un museo. ¿Pero eso no es la felicidad?", continuó.

Por último, recordó a algunas cómicas históricas y dijo que no fueron "patitos feos", sino cisnes que "volaron muy alto". Estas fueron Rafaela Aparicio, Florinda Chico, Gracia Morales y Verónica Forqué. "Rompieron barreras para que estemos hoy aquí, empezaron a hacer un humor femenino y universal" no fueron patitos feos, sino cisnes y volaron muy alto", concluyó.

Todos los premiados de los Forqué 2023

Respecto a los premios, el primero en recibir un premio fue Roger Casamajor, que se llevó la Mejor Interpretación Masculina en Series de Ficción por La Mesías, una categoría en la que estaba también su compañero de reparto, Albert Pla. "Gracias a mi familia de La Mesías, dijo, visiblemente emocionado".

Maite Alberdi fue la siguiente en subirse al escenario para recoger el premio a Mejor Película Latinoamericana del año, por La Memoria infinita. La chilena aprovechó para recordar cómo, con su largometraje, había intentado hablar con el enfoque más positivo posible de una enfermedad como el Alzhéimer.

La Sala de Prensa de los Forqué se llenó de aplausos para celebrar a la siguiente premiada, Malena Alterio, nominada también a un Goya por Que nadie duerma. La actriz pidió el alto al fuego en Gaza, pero también aprovechó para recordar a su familia por los valores que le inculcaron de pequeña, así como para decir que la mitad del premio se iba a EE.UU. por Antonio Méndez Esparza, director de la película.

Guillermo García López se llevó el premio a Mejor Cortometraje por Aunque es de noche y, al igual que hizo en entrevista con El Independiente hace poco, aprovechó para pedir soluciones para la Cañada Real, que lleva cuatro años sin corriente eléctrica.

El premio al cine en Educación y Valores se lo llevó Estibaliz Urresola por 20.000 especies de abejas. La alavesa pidió el alto al fuego en Gaza y apuntó que nunca habría esperado tal repercusión para la película, que es además una de las que tiene más nominaciones a los Goya 2024.

La ganadora a Mejor Interpretación Femenina en Series de Ficción fue Lola Dueñas por La Mesías, una categoría en la que también estaba su versión más joven en la citada serie. La actriz mencionó a su marido en la película, Albert Pla, y a todos sus hijos.

Sin embargo, se emocionó especilamente al darle las gracias a Los Javis y a su sensibilidad, que no pudieron contener la emoción desde el público. El Premio del Público no fue ninguna sorpresa, pues se lo llevó la rompedora de récords Campeonex y el premio lo recogió Javier Fesser, que se sumó a la petición del alto en fuego en Gaza, pero también reivindicó más accesibilidad.

La mejor interpretación masculina fue para David Verdaguer, por Saben Aquell. "Sin Conchita no hubiese existido Eugenio, y sin Carolina yo no habría estado en la peli. Se lo dedico a los cómicos. Es un trabajo muy serio, yo quiero más a la gente que me hace reír. A mi hija Lupe de seis años, que no sabe qué es esto, pero me quiere mucho y me hace reír", dijo, en el agradecimiento más tierno de la noche.

La Medalla de Oro, tal y como se había anunciado, la recibió Eduardo Campoy. El productor aprovechó para pedir "unión" en la lucha por conseguir un mundo mejor. También recordó que llevaba nada más y nada menos que 40 años haciendo películas. "Si no he trabajado con alguno de vosotros... no os preocupéis, que lo haré en los próximos 40 años", bromeó.

El premio Mejor Largometraje Documental se lo llevó Juan Mariné: un siglo de cine, en homenaje al restaurador. En una larga intervención, los directores aprovecharon para agradecer al Museo del Prado por permitirles grabar dentro.

"El arte tiene que cambiar vidas"

La siguiente fue muy especial, pues inauguró la categoría Mejor largometraje de animación. Se llevó el premio Pablo Berger por Robot Dreams, que narra la amistad entre un robot y un perro. "Creemos que la tarea de los productores es darle a los directores todo lo que necesitan para crear la película que han soñado, eso hicimos y aquí estamos", declaró.

Mejor serie de Ficción, como era de esperar, fue para los Javis. Ambrossi aprovechó para recordar a la red de apoyo que le permite ser "creativo". También puso en valor la labor de Movistar + por dejarles trabajar con una "libertad absoluta". "Una industria sana es la que está a la altura de sus creadores", añadió.

Por su parte, Javier Calvo recordó cómo, cuando preparaban la serie, recibieron comentarios sobre por qué necesitaban tanto presupuesto. "No era lo que contábamos, sino cómo lo contábamos. Ahora solo se hacen cosas para el consumo, pero nosotros queremos hacer otros trabajos, que a veces duelan. Aquí, todos hacemos arte y el arte tiene que cambiar vidas. Gracias a quienes dejan que el arte cambie sus vidas", apuntó

Estibaliz Urresola se subió por segunda vez al escenario para recoger el premio a Mejor Largometraje de Ficción, pero en este caso fue Valérie Delpierre quien intervino. La francesa, que es una de las productoras ejecutivas, dijo que no esperaba el galardón.