El productor James Cameron y Linda Hamilton regresan junto al director Tim Miller en Terminator: Destino oscuro,  que sigue a los acontecimientos de Terminator 2: El Juicio Final y que llega a los cines el 1 de noviembre.

Una de los puntos fueres de esta película es la reaparición de la actriz Linda Hamilton, que vuelve a participar de esta saga transformada en una verdadera heroína con años de experiencia combatiendo contra los cyborg.

Ella volverá dar vida a Sarah Connor y Arnold Schwazenegger, evidentemente, al T-800 que es enviado desde el futuro para proteger al hijo de ésta, John Connor y líder la resistencia contra Skynet, en la segunda película.

Han pasado muchos años desde aquel 1991 en el que se estrenó Terminator 2, por lo que el filme, según reveló James Cameron, dará cumplida explicación al actual, y evidentemente mucho más envejecido, aspecto del personaje cibernético encarnado por Schwazenegger.

"Él es un cyborg, pero su exterior es su parte orgánica. Como ya dijo Kyle Reese en la primera película, sudan, tienen mal aliento. Debido a que se suponía que se trataba de unidades de infiltración, está presente la idea de que la carne recubre un esqueleto metálico, por lo que envejecen normalmente", explicaba Cameron.