Este lunes se registraron en India 168.000 nuevos contagios por coronavirus, sexto día consecutivo de récord de casos desde el inicio de la pandemia. Sin mascarilla, sin distancia y con el virus desbocado, ese mismo día miles de devotos hindúes acudieron a la ciudad de Haridwar para la celebración del baño ritual Kumbh Mela.

Actualmente, India es el segundo país del mundo con más casos acumulados, (13,5 millones, sólo por detrás de EEUU) y las muertes ascienden a 170.000 desde que comenzó la pandemia. La situación en la India está tan descontrolada que las autoridades locales aprobaron este lunes por la vía de emergencia el uso de la vacuna Sputnik. Hasta el momento se han inoculado 105 millones de dosis de AstraZeneca y Covaxin.

Sin duda, una de las causas de que la curva de contagios esté disparada es la relajación de la gente y la celebración de fiestas multitudinarias, tal y como apunta el doctor Amir Khan en una columna reciente en la página web de Al Jazeera. Otra razón que podría estar detrás de este aumento vertiginoso es la aparición reciente de una variante del coronavirus. La secuenciación del genoma realizada por un consorcio de diez laboratorios en India ha identificado dos mutaciones de esta variante. "La variante doble mutante", como la definió el Ministerio de Salud.

E484Q y L452R, la "doble mutante"

"Estas mutaciones confieren un escape inmunológico y una mayor infectividad", añadió el Ministerio. Es decir, podríamos estar hablando de un virus más inteligente, capaz de infectar más rápido e incluso capaz de reinfectar, de burlar los anticuerpos neutralizantes de los ya contagiados. De momento, no hay estudios suficientes para determinar si las vacunas que se están inoculando son resistentes a estas mutaciones.

El experto Fernando González Candelas, Catedático de Genética de la Universidad de Valencia, cree que seguramente las vacunas sean menos efectivas ante esas variantes. "Pero de ahí a decir que hay un escape inmunológico, que es decir que las vacunas no son efectivas, hay una gran distancia", explica a El Independiente. "Escrito científicamente no lo he visto en ningún sitio y dudo que sea así. Yo creo que lo que busca la India es asustar a la población para forzar a que se tomen más en serio las medidas".

En poco tiempo la nación asiática ha visto dispararse los casos desde los menos de 9.000 diarios registrados a principios de febrero, hasta los 168.912 confirmados el lunes

La mutación en este caso se ha producido en la proteína spike, que es la llave de acceso a las células humanas. Por un lado, está la conocida como E484Q, "que responde a una posición en la proteína spike asociada a un efecto de escape o menor efecto de las vacunas", explica González Candelas.

Y luego está la mutación L452R, que en teoría implica una mayor transmisibilidad. "No obstante, creo que no se puede asociar el aumento de casos de las últimas semanas con estas variantes. Lo lógico, de hecho, es que la mutación se haya producido por un vertiginoso aumento de los contagios", advierte el experto.

La mayor parte de las muestras con esta doble mutación se recogieron en el estado de Maharashtra, una zona donde se cuentan más del 60% de los contagios del país. Según datos oficiales, la presencia de esta variante sería de entre el 15 y el 20% en las muestras de ese Estado. De momento, las autoridades no la han considerado como "una variante de preocupación". "Pero lógicamente hay que tenerla bajo la lupa y ver qué pasa. Los datos por ahora no parecen preocupantes, pero hay que monitorear todo bien", indice González Candelas.

La vacunación, la única salida

A más contagios y a más transmisibilidad, más posibilidades hay de que el virus mute. "Por algo las variantes más conocidas han surgido en Reino Unido, Brasil o Sudáfrica, no es casualidad", apunta el catedrático. Por eso, la única salida para frenar las mutaciones es inmunizar a la población.

En India, la rápida expansión del virus ocurre al tiempo que las autoridades intentan acelerar su masiva campaña de vacunación, dirigida a los mayores de 45 años, con el objetivo de prevenir las muertes y los casos graves de la enfermedad. El país superó el sábado un primer hito con la administración de más de 100 millones de dosis en 85 días de vacunación, tras varias iniciativas del gobierno para impulsar la campaña, a pesar de que algunas regiones indias han reportado escasez de viales.

La India fabrica dos antídotos contra la covid: Covishield, del laboratorio británico-sueco AstraZeneca y la Universidad de Oxford, que se produce gracias a un acuerdo con el Instituto Serum de la India (SII); y la indígena Covaxin, del laboratorio indio Bharat Biotech.