La falta de una vivienda digna o las dificultades para acceder a una son factores de gran impacto sobre el riesgo de exclusión social de las personas. El incremento de la situación de indefensión de diferentes colectivos, principalmente jóvenes, personas mayores y, cada vez más, familias con rentas muy bajas, ha propiciado que la Obra Social “la Caixa” impulse programas para atender estas demandas.

Una de las grandes preocupaciones de los ciudadanos es el encarecimiento de la vivienda. Facilitar el acceso se ha convertido en una de las prioridades de la Obra Social ”la Caixa”. Mediante diferentes iniciativas (Vivienda Asequible, Alquiler Solidario, Alquiler Social y el Fondo Social de Viviendas), el Grupo ”la Caixa” ya tiene más de 33.000 pisos. Estas viviendas, cuyas rentas mensuales parten de 85 euros, están repartidas por toda España y a disposición de las personas con menos recursos. “El proyecto Vivienda Asequible, por ejemplo, nació en 2004, estaba destinado a menores de 35 y mayores de 65 años. Escogimos estas franjas porque pretendíamos ayudar a los jóvenes a emanciparse y, por otra parte, apoyar a personas mayores para que mejoraran su calidad de vida. Compramos suelo y construimos 50 promociones que se repartieron por sorteo entre los solicitantes”, explica Mireia Ferrer, directora general del Programa Vivienda de la Obra Social “la Caixa”.

Vivienda Asequible centra sus esfuerzos en ofrecer alternativas para apoyar la emancipación de los jóvenes

Vivienda Asequible centra sus esfuerzos en ofrecer alternativas para asegurar la emancipación de los jóvenes que acceden a la primera vivienda y también para dignificar las viviendas de las personas mayores. Durante 2016 el programa entregó 71 viviendas nuevas, que se dieron a personas con rentas entre los 190 y los 425 euros y, en el caso de las familias, con una horquilla de alquiler de entre los 250 y los 540 euros.

Interior de uno de los apartamentos de Vivienda Social de la Caixa en Vallecas.

“Los alquileres de Vivienda Asequible eran para cinco años, puesto que se trataba de convertirnos en piso puente para la emancipación. La situación del país y la severa crisis que atravesamos nos hizo replantearnos el tema y abrir el programa a nuevas necesidades. Así que lo ampliamos a familias con rentas bajas”. Para ello, la Obra Social “la Caixa” creó el proyecto Alquiler Solidario, en esta ocasión aprovecharon activos de la entidad finaciera.

En Alquiler Solidario se ofrecen pisos a personas que acrediten una renta muy baja

En la modalidad de Alquiler Solidario se ofrecen pisos de alquiler a personas que acrediten niveles de renta muy bajos. En 2016 el proyecto subvencionó 167 pisos y situó en el mercado 5.908 viviendas. Se trata de contratos de alquiler de entre tres y cinco años de duración, subvencionados por la Obra Social en un 50%. “La mayoría de estos pisos están localizados en pequeños municipios, incluyendo capitales de provincia, aunque en Madrid o Barcelona no tenemos gran oferta”, explica Ferrer.

Integración social

El empeño de la fundación por apoyar acabar con la marginalidad, le ha llevado a apoyar una serie de proyectos de entidades solidarias que centran sus esfuerzo en luchar para acabar con  la integración social, en favor de colectivos en situaciones de exclusión, máxima vulnerabilidad o grandes dificultades para acceder en igualdad de condiciones a un trabajo o a una vivienda digna.

En 2016 se destinaron 19,7 millones de euros a proyectos de iniciativas sociales, de los que 1,17 millones de euros se entregaron a 45 proyectos de Viviendas de Inclusión Social en la convocatoria general de la Fundación Bancaria ”la Caixa”.

A estas ayudas hay que añadir otra de 152.430 euros más de convocatorias de ayudas territoriales específicas, que ha permitido apoyar siete proyectos más de vivienda social. La estimación de beneficiarios de los recursos residenciales de estos 52 proyectos en 2016 es de más de 3.800 personas.


Este contenido ha sido elaborado con la colaboración de la Obra Social "la Caixa"