Las dimisiones en masa de ministros y secretarios del Gabinete de Boris Johnson ha acorralado al primer ministro británico, que se aferra al cargo pese a la gran crisis que vive su gobierno. Según adelantó anoche la radiotelevisión británica BBC, Johnson ha asegurado que no piensa dimitir y ha resaltado que tiene "un mandato colosal" derivado de las elecciones de 2019, a la par que ha dicho que "seguirá en marcha" pues la crisis interna no está afectando a la acción del Ejecutivo.

En la noche de ayer miércoles, un grupo de altos funcionarios del gabinete de Johnson, entre ellos el responsable de Cohesión Territorial, Michael Gove, acudieron a Downing Street para trasladarle al 'premier' la necesidad de que renuncie al cargo en medio de la crisis de gobierno, iniciada el martes tras la dimisión de dos ministros y varios subalternos.

Como consecuencia Johnson ha despedido a Michael Gove, después de que este dijera que "no puedes tener una serpiente que no está contigo en ninguno de los grandes argumentos y que luego dice alegremente a la prensa que el líder tiene que irse".

El nuevo día no ha frenado las dimisiones en el ejecutivo de Johnson. Brandon Lewis, secretario para Irlanda del Norte y miembro clave del gabinete ha anunciado su dimisión hoy mismo lamentándolo "profundamente", y ha incidido en que de un Gobierno se espera "honestidad, integridad y mutuo respeto". A su adiós se han unido el de Damien Hinds, subsecretario de Seguridad, que ha solicitado "un cambio de liderazgo", el de Helen Whatelysubsecretaria de Tesoro, que ha condenado las veces que Johnson pudo "pedir perdón y pasar página", y la despedida de Guy Opperman,  secretario de pensiones, que ha sido contundente a su salida: "El gobierno simplemente no puede funcionar si continúas a cargo". También han abandonado su cargo el subsecretario de Ciencia George Freeman o el secretario de Tecnología Chris Philp.

Por su parte, el líder del opositor Partido Laborista, Keir Starmer, ha denunciado que los 'tories' se han convertido "en un partido corrupto que defiende lo indefendible", al tiempo que ha criticado a los ministros que han dimitido por no haberlo hecho antes y demostrar que carecen de "algo de integridad".