La interminable guerra en Gaza, que se ha cobrado ya cerca de 65.000 vidas y devastado el enclave palestino, amenaza con sacudir los cimientos de la política internacional. El deseo de Benjamin Netanyahu, que ayer reconoció estar preparándose para el creciente aislamiento de su país, de continuar la contienda ha puesto en aprietos a la derecha europea. Tradicionalmente cercana a Israel por razones históricas y de seguridad, el bloque conservador y liberal ha empezado a fracturarse. Mientras unos líderes mantienen aún un apoyo sin fisuras al gobierno de Netanyahu, otros han endurecido sus críticas por la magnitud de las víctimas civiles, la expansión de los asentamientos ilegales en Cisjordania ocupada, el nivel de violencia de los colonos israelíes y la vulneración sistemática del derecho internacional.
El resultado de esas tensiones cada vez más evidentes es un mosaico heterogéneo de posturas entre los partidos de derecha con responsabilidades de gobierno: desde Giorgia Meloni en Italia, que equilibra el respaldo a Israel con reproches cada vez más explícitos hacia Netanyahu, hasta Emmanuel Macron en Francia, que denuncia el doble rasero occidental y se prepara para escenificar la semana pasada el paso al que se había resistido durante estos dos últimos años de ofensiva: reconocer el Estado palestino como un modo de presión sobre el ultraderechista gobierno de Israel.
Italia: Meloni entre la solidaridad y la crítica
Giorgia Meloni encarna la tensión de una derecha atrapada entre la lealtad histórica a Israel y la necesidad de responder a la indignación internacional. La primera ministra italiana, que ha demostrado ejercer una política internacional pragmática a pesar de los recelos que siempre suscitó su procedencia política, ha sido clara en reconocer el derecho de Israel a defenderse tras los ataques del 7 de octubre, pero sus palabras han evolucionado hacia un tono mucho más severo con Tel Aviv.
“No hemos dudado ni un segundo en apoyar a Israel, pero no podemos permanecer en silencio ahora que se ha cruzado el límite de la proporcionalidad”, afirmó a finales de agostotras un bombardeo en Gaza que alcanzó hasta en tres ocasiones al hospital Al Naser y asesinó a cinco periodistas. En foros internacionales, ha calificado de “inaceptables” los ataques contra civiles y ha pedido al G-7 que respalde un alto el fuego inmediato.
El 21 de agosto censuró la política de asentamientos en Cisjordania ocupada y el horizonte marcado por Netanyahu de la anexión completa del territorio: “Esta decisión es contraria al derecho internacional y compromete la solución de los dos Estados”, advirtió después de que Israel anunciara nuevas colonias. No obstante, mantiene cautela en el reconocimiento del Estado palestino: dice sentirse “favorable”, pero alerta de que hacerlo “sobre el papel, sin condiciones reales”, podría bloquear más que impulsar la paz. También ha criticado los ataques de Israel contra miembros de la FINUL en el Líbano y ha pedido a Netanyahu que detenga una crisis que ha calificado de “dramática e injustificable”.
Alemania: Merz rompe un tabú histórico
En Berlín, el líder democristiano Friedrich Merz ha abierto un debate que parecía vetado. Al señalar que las operaciones militares israelíes “ya no pueden justificarse únicamente como lucha contra el terrorismo”, Merz rompió con la tradición alemana de apoyo casi incondicional a Israel, la que previamente había mantenido su predecesor, el socialdemócrata Olaf Scholz.
El gobierno, coalición de la CDU y los socialdemócratas, ha suspendido licencias de exportación de armas que podrían usarse en Gaza. Un gesto de enorme carga simbólica en un país marcado por la memoria del Holocausto, que durante décadas ha sido rehén de esa culpabilidad no resuelta.
Bruselas: Von der Leyen gira el timón
La presidenta de la Comisión Europea, la democristiana alemana Ursula von der Leyen, sorprendió en su reciente discurso sobre el Estado de la Unión al anunciar “sanciones contra ministros de la ultraderecha israelí” y la suspensión parcial del acuerdo de asociación UE-Israel. Acusada en 2023 de alinearse de forma acrítica con Tel Aviv y denunciada por sus propios funcionarios, la dirigente popular marcó así un cambio sustancial en el tono de la Comisión.
Además, criticó los planes del ejército israelí para ocupar la zona E1, en Cisjordania, que según ella serían parte de un cambio sistemático para “asfixiar financieramente” a la Autoridad Palestina. Aseguró que esas acciones constituyen un claro intento de socavar la solución de dos Estados y amenazan la viabilidad de un Estado palestino. “Soy consciente de que será difícil conseguir mayorías. Y sé que cualquier medida será excesiva para algunos. Insuficiente para otros. Pero todos debemos asumir nuestras responsabilidades: el Parlamento, el Consejo y la Comisión”, dijo tras reconocerse como “amiga de Israel de larga data”.
Países Bajos e Irlanda: sanciones y reconocimiento
En La Haya, el actual ministro de Exteriores David van Weel, respaldado por la coalición de centro-derecha y en la cuota del centroderecha liberal Partido Popular por la Libertad y la Democracia, ha impulsado la prohibición de productos procedentes de los asentamientos y vetó la entrada a ministros israelíes de extrema derecha.
Su predecesor Caspar Veldkamp dimitió el pasado agosto precisamente por las tensiones que habían estallado en el Gabinete a propósito de Gaza. Veldkamp no pudo conseguir el apoyo de sus colegas de ejecutivo para imponer nuevas sanciones contra Israel por su ofensiva militar en Gaza, en concreto por la invasión planificada en Ciudad de Gaza y el agravamiento de condiciones humanitarias, con la declaración de hambruna por parte de la ONU. Según encuestas recientes, alrededor del 65 % de los neerlandeses no aprueban la forma en que el gobierno maneja el conflicto con Gaza y piden que Holanda sea más crítica con Israel y que adopte medidas más fuertes.
En Dublín, Simon Harris (Fine Gael, afiliado al Partido Popular Europeo) ha ido aún más lejos: tachó de “totalmente reprobables” los bombardeos en Rafah, lideró el reconocimiento de Palestina junto a España y Noruega y pidió al conjunto de la UE medidas más contundentes. En Irlanda la causa palestina no es motivo de división política y cosecha apoyos a ambos lados del tablero político. De hecho, Israel terminó optando por el cierre de su embajada en Dublín. Su entonces embajadora Dana Erlich es desde agosto encargada de negocios en España.
Escandinavia: presión humanitaria
Suecia, bajo el gobierno de Ulf Kristersson -del conservador liberal Partido Moderado- ha respaldado sanciones contra colonos violentos y duplicado la ayuda humanitaria. El pasado mayo convocó al embajador israelí en Estocolmo para protestar por las enormes restricciones al acceso de ayuda humanitaria para Gaza. En una tribuna en junio junto a otros miembros de su gabinete, Kristersson declaró que Suecia apoya revisar si Israel no cumple con sus obligaciones de derechos humanos bajo el Acuerdo de Asociación UE-Israel. “La forma en que Israel está llevando a cabo esta guerra es inaceptable. Tras 19 meses de derramamiento de sangre y conflicto en Gaza, el sufrimiento humanitario es enorme, con decenas de miles de muertos y malnutrición generalizada entre la población. Sobre todo los niños de Gaza, que viven una pesadilla”, escribió el premier.
Dinamarca, con Lars Løkke Rasmussen -ministro de Exteriores bajo las siglas de Los Moderados, un partido político liberal-, ha declarado “errónea” la expansión de la ofensiva en Gaza y exigió su reversión inmediata. Aunque no es partidario del reconocimiento actual del Estado palestino, ha reafirmado que Dinamarca apoya una solución de dos Estados como base para la paz.
Grecia y Bélgica: lenguaje severo
El primer ministro griego, el consevador Kyriakos Mitsotakis, ha tildado de “injustificables e inaceptables” los recientes ataques en Gaza, desmarcándose de la tradición helena de estrecha alianza con Israel. Reconoce que Grecia tiene relaciones estratégicas con Israel, pero ha subrayado que ello no le impide expresar críticas cuando considera que las acciones de Israel provocan sufrimiento humano excesivo.
En Bélgica, la nueva coalición liderada por Bart De Wever, del conservador N-VA, se ha comprometido a reconocer al Estado palestino y a impulsar sanciones, incluida la prohibición de productos de los asentamientos, en mitad de una presión popular creciente. El reconocimiento, sin embargo, está sujeto a que Hamas esté fuera del gobierno palestino; que haya una Autoridad Palestina creíble; tener claridad sobre qué territorio palestino se reconoce. No obstante, ha rechazado la afirmación de que Israel esté cometiendo genocidio en Gaza, diciendo que es una afirmación “muy dudosa” y que ese tipo de determinación corresponde al Tribunal Penal Internacional.
Francia: Macron contra "el doble rasero"
Emmanuel Macron, situado en el espacio centrista pero cercano al bloque liberal y conservador europeo, ha insistido en denunciar el “doble rasero” occidental: la firmeza frente a Rusia en Ucrania frente a la indulgencia hacia Israel en Gaza. Sus declaraciones han buscado reposicionar a Francia como actor de equilibrio, abogando por un alto el fuego y por el reconocimiento de Palestina como paso necesario hacia la paz, una medida que escenificará la semana próxima en Nueva York coincidiendo con la Asamblea General de la ONU. La decisión le ha valido acusaciones y duras críticas de Israel. “Nos oponemos firmemente a la expansión de las operaciones militares de Israel en Gaza. El nivel de sufrimiento humano en Gaza es intolerable”, dijo en mayo.
La fotografía de conjunto revela una derecha europea partida en dos. La cuestión israelí se ha convertido en un nuevo campo de batalla interno para la derecha europea: entre la solidaridad histórica, la afinidad ideológica con parte de los miembros del Gobierno israeí y la obligación política y moral de denunciar la desproporción, las violaciones del derecho internacional y la crisis humanitaria.
Te puede interesar
Lo más visto
Comentarios
Normas ›Para comentar necesitas registrarte a El Independiente. El registro es gratuito y te permitirá comentar en los artículos de El Independiente y recibir por email el boletin diario con las noticias más detacadas.
Regístrate para comentar Ya me he registrado