La Comisión Europea ha propuesto este jueves reformar el sistema actual de IVA para dar más libertad a los países del bloque comunitario a la hora de tomar decisiones sobre los diferentes tipos de este impuesto, eliminando la lista de bienes y servicios que actualmente pueden beneficiarse del tipo reducido.

El comisario de Asuntos Económicos y Monetarios, Pierre Moscovici, ha presentado en una rueda de prensa la propuesta legislativa, que sin embargo necesita ahora unanimidad entre los Estados miembros para ser aprobada.

El modelo actual entró en vigor en 1993 y establece un tipo general de IVA de un 15% como mínimo para todos los bienes y servicios. No obstante, los socios del bloque comunitario pueden aplicar un tipo reducido de al menos el 5% a una lista predefinida de bienes y servicios. Además, algunos países disfrutan de una serie de derogaciones acordadas cuando se unieron al club europeo.

Bruselas afirma que este modelo ha conducido a un "mosaico" de regulaciones en la UE que también generan "desigualdades" en el bloque comunitario. "Algunos Estados miembros disfrutan de excepciones, mientras que otros no tienen permitido aplicar tipos reducidos o tipos cero a los mismos productos o servicios", justifica el Ejecutivo comunitario.

La propuesta permitiría a los Estados introducir hasta cuatro tipos de IVA por debajo del mínimo general del 15%

La nueva propuesta de la Comisión Europea aboga por mantener un tipo general mínimo del 15% pero abre la puerta a que los Estados puedan introducir otros cuatro por debajo de este umbral estándar. En concreto, los países podrán fijar dos reducidos entre el 5% y el tipo general, una excepción del pago del IVA (o tipo cero) e introducir otro más entre este tipo nulo y los reducidos. En total, los Estados miembros tienen libertad para establecer hasta cinco tipos distintos en este gravamen.

La media ponderada de los tipos debería superar el 12% para evitar competencia fiscal en la UE

Del mismo modo, Bruselas propone eliminar la lista actual de bienes y servicios a los que se puede aplicar un tipo reducido, que será sustituida por una nueva lista de productos a los que obligatoriamente se tiene que aplicar el tipo general. En esta nueva lista estarán por ejemplo las armas, las bebidas alcoholicas, el tabaco, los productos relacionados con los juegos de apuestas, los metales preciosos, los 'smartphones', los electrodomésticos o los servicios financieros.

En todo caso, el Ejecutivo comunitario pide introducir una salvaguardia por la cual los países tendrían que garantizar que la media ponderada de los tipos del IVA sea superior al 12%, para evitar la competencia fiscal entre los socios europeos y potenciales riesgos en la recaudación de los Estados.