El secretario de Estado de Infraestructuras y número dos del Ministerio de Fomento, Julio Gómez-Pomar, ha pedido a Europa, concretamente a la Comisión Europea, que "presione" a Francia para que dé continuidad a su red de AVE (TGV, en francés) hasta la frontera con España. El Gobierno de Macron ha retrasado sine die la conexión de París con Perpiñán (prevista para 2030) y con Hendaya (2032), por lo que la unión de este tipo de tren rápido con Cataluña y País Vasco no tiene fecha de llegada.

Gómez-Pomar, ex presidente de Renfe en la primera legislatura de Mariano Rajoy, ha lanzado esta crítica en un acto sobre el Corredor Mediterráneo en Barcelona celebrado este martes. El secretario de Estado ha lamentado que el retraso en las obras puede suponer un "cuello de botella" para España.

"Tendremos problemas"

"Llegaremos a la frontera con Francia y habrá tramos que no serán de alta velocidad, y si no se solucionan los cuellos de botella tendremos problemas", ha indicado Gómez-Pomar, en presencia de una alto cargo de la Comisión. "Europa tiene que presionar a Francia, porque estamos hablando de países conectados por el Corredor Mediterráneo", ha reivindicado.

La policy officer de la Dirección General de Movilidad y Transporte de la Comisión Europea, Isabelle Maës, ha respaldado las tesis de Fomento. "La conexión entre Perpignan y Barcelona debe estar resuelta, no estamos contentos con esta situación", ha resaltado Maës.

"No estamos contentos"

En el mismo acto, Gómez-Pomar ha anunciado que Fomento licitará "en los próximos meses" unos 17 contratos de obras de construcción de distintos tramos del Corredor Mediterráneo por un importe total de 2.100 millones de euros.

El grueso de estas obras corresponderá a los trazados de esta línea ferroviaria correspondientes a las conexiones con Almería y Murcia, donde el proyecto acumula un mayor retraso, según reconoció el coordinador del Corredor, Juan Barios.

Por contra, en Cataluña el Corredor presenta ya un grado de ejecución superior al 90%, y entre los trabajos que resta destaca la construcción tramo comprendido entre Castellbisbal y Martorell (Barcelona), que volverá a salir a concurso tras resolverse el contrato anterior.