Los edificios que Amancio Ortega agrupa en su cartera inmobiliaria valen casi tanto como una empresa del tamaño de Naturgy. El multimillonario gallego logró batir su propio récord en 2019, elevando el valor total de sus inmuebles hasta los 15.163 millones de euros. La cifra alcanzada implica un crecimiento fulgurante del 50%, frente a los 10.000 millones logrados al cierre del ejercicio anterior.

Para visualizar el volumen del otro imperio levantado por Ortega basta con aportar algunas cifras que sirvan de referencia. Los rascacielos y edificios con solera de Pontegadea suman un valor de mercado superior al de Repsol, que tiene una capitalización bursátil de 12.000 millones; o tanto como la suma de Acciona, Mapfre e IAG (unos 5.000 millones de euros cada una).

2019 fue un año de vacas gordas para Pontegadea, el grupo que reúne todas las sociedades de cartera propiedad de Amancio Ortega, sus filiales inmobiliarias y sus participaciones empresariales. Cerró el ejercicio con una cifra de negocio de 2.261 millones de euros y un resultado neto positivo de 1.778 millones de euros (1.550 millones en 2018), tras contabilizar 104 millones de euros en donaciones a la Fundación Amancio Ortega.

A lo largo del año, la empresa realizó inversiones inmobiliarias por valor de 2.065 millones de euros. Las mayores operaciones se llevaron a cabo en Estados Unidos. Pontegadea adquirió allí los complejos Troy Block y Arbor Blocks, en Seattle; y el edificio en enclavado en el 815 de Connecticut Avenue de Washington DC.

En Europa (donde está localizado el 61% de la cartera inmobiliaria), la empresa se hizo con un edificio emblemático de Reino Unido, The Post Building.

El negocio del magnate de A Coruña llega mucho más allá de las fronteras de Inditex, que es la mayor compañía de España. Pontegadea se nutre con el torrente de dividendos que le llegan de la multinacional de la moda. Gracias a ellos ha conseguido aunar en la misma cartera inmuebles tan famosos como la Torre Cepsa en Madrid (la más alta de toda España, con la firma de Norman Foster); o el Edificio Haughwout, una joya arquitectónica de Nueva York. Ortega es el casero en algunas ciudades de grandes multinacionales como Facebook o Amazon.

Torre Cepsa, propiedad de Amancio Ortega.
Torre Cepsa, propiedad de Amancio Ortega. WIKIPEDIA

Desde que inició su aventura inmobiliaria, Amancio Ortega siempre huyó de la tentadora promoción de vivienda -la que llevó a la ruina a tantos constructores en la anterior crisis). Sin embargo, optó por ampliar los horizontes de Pontegadea con la incorporación de participaciones empresariales.

De este modo, junto a los rascacielos míticos se alinean las inversiones en Telxius (casi un 10%) o Enagás (5%). Y, por supuesto, la joya de la corona: Inditex (en la que Ortega controla un 59,29%).

Según la información difundida este martes, en el balance de Pontegadea se contabiliza una deuda financiera de 1.091 millones de euros y tesorería y equivalentes por valor de 907 millones. También compromisos de donación a la Fundación Amancio Ortega por importe de 268 millones de euros.

La compañía también asegura que no ha identificado efectos adversos significativos en su negocio a causa de la pandemia. No obstante, admite que podría afectar potencialmente a los ingresos por arrendamientos y dividendos.

Reorganización societaria

Según informa la compañía, con posterioridad al cierre del ejercicio, Pontegadea ha realizado varias operaciones de ordenación societaria para simplificar su estructura: la absorción de la sociedad Grilse, propietaria de activos inmobiliarios en España, por Pontegadea España; la absorción por Pontegadea Inversiones de su filial Pontegadea 2015 con sus participaciones financieras (entre ellas la participación en Telxius); y la escisión de Pontegadea Inversiones de la nueva sociedad Pontegadea GB 2020, que agrupa activos inmobiliarios localizados en el mercado británico.