Marcha de transportistas en la M-40 de Madrid.
La multinacional Lactalis (fabricante de marcas como Puleva, President, El Ventero, Galbani o La Lechera) alerta de una "situación crítica" en sus fábricas por el paro de transportistas que alcanza ya su novena jornada.
La compañía asegura que a sus ocho fábricas de yogures, quesos y batidos "no están llegando plásticos, papel-cartón, palés o ingredientes para elaborar y envasar" los productos lácteos. Según dicen, ahora mismo "se acumula el producto terminado mientras la caducidad corre al tratarse de un producto perecedero".
"Las vacas no tienen un grifo que podamos cerrar ni la leche la podemos tener en las fábricas pues necesita su elaboración y tiene una caducidad muy limitada. Desde Grupo Lactalis apelamos al diálogo y a la negociación para evitar un mayor colapso en la cadena láctea", ha asegurado Ignacio Elola, consejero delegado de Grupo Lactalis en España, en la fábrica de la compañía de Vilalba (Lugo).
La compañía reconoce dificultades en la recogida de la leche y recuerdan que es "un alimento esencial y de baja caducidad que no puede esperar". "Desde el respeto al derecho a la huelga y el respeto al derecho a no hacerla y a la libre circulación, solicitamos a todas las partes implicadas que comprendan el colapso que estamos alcanzando en un sector básico para la alimentación diaria y para la economía del país como es el lácteo", ha añadido Elola.
La Plataforma para la Defensa del Transporte de Mercancías por Carretera Nacional e Internacional, convocante de los paros, mantiene las protestas pese a la oferta del Gobierno de destinar 500 millones de euros para bonificar el gasóleo profesional.
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