"Schiphol quiere prohibir los jets privados" y lo hará como muy tarde entre 2025 y 2026. El aeropuerto de Schiphol, el primer aeropuerto de Países Bajos y el más cercano a Ámsterdam, ha incluido esta medida entre las que llevará a cabo para reducir la contaminación acústica que producen los aviones para la población cercana, así como para disminuir las emisiones de dióxido de carbono.

En un comunicado, el aeropuerto justifica que existen suficientes vuelos comerciales programados a los principales destinos de los jets privados, como para tener que recurrir a esta opción que contamina -según datos de Schiphol- 20 veces más que un vuelo comercial. Entre estos destinos se encuentra Ibiza, pero también Cannes (Francia) e Innsbruck (Austria).

Otra de las medidas que se pondrá en marcha será la prohibición del despegue de vuelos entre la medianoche y las seis de la mañana y también el aterrizaje entre las 00:00 horas y las cinco de la mañana. "Soy consciente de que nuestras decisiones pueden tener un impacto significativo sobre la industria de la aviación, pero son necesarias", ha dicho Ruud Sondag, el CEO de Royal Schiphol Group.

"Nuestras decisiones pueden tener un impacto significativo sobre la industria de la aviación, pero son necesarias"

Esta iniciativa tendrá un impacto directo para la recepción de viajeros del aeropuerto de Ibiza. Fuentes de Aena señalan que "evaluarán" las consecuencias cuando llegue el momento. Por otra parte, añaden que "no tienen competencias" para tomar decisiones como la que acaba de comunicar el aeropuerto neerlandés.

El informe CO2 emissions of private aviation in Europe (Emisiones de dióxido de carbono de la aviación privada en Europa), elaborado por CE Delft, por encargo de Greenpeace, muestra que en 2021 la segunda ruta más común para jets privados en Europa fue entre Ámsterdam e Ibiza y viceversa.

Ese año se realizaron 314 vuelos entre ambas ciudades, solo por debajo de los 411 que se hicieron entre Londres y Ámsterdam, en 2021. La cifra de 2022 todavía no se ha dado a conocer, pero será previsiblemente mayor a juzgar por el incremento que han tenido este tipo de vuelos en Europa. En 2021, fueron 350.078 y en 2022, la cifra alcanzó los 572.806, un 63% más en solo un año.

Protestas ecologistas

Los jets privados han sido objeto de las protestas de grupos ecologistas por la contaminación que causan y porque son un signo de desigualdad, ya que únicamente los utilizan los millonarios que tienen acceso a ellos. El pasado 14 de febrero, miembros de Extinction Rebellion, Scientist Rebellion y Stay Grounded entre otros realizaron acciones en 11 países distintos para denunciar la "injusticia climática" de la aviación privada.

En España, las acciones se realizaron en las terminales de jets privados de los aeropuertos de Ibiza, Mallorca, Madrid, Sevilla y Alicante. Precisamente en los tres primeros es donde más vuelos de este tipo se registran a nivel europeo, según el informe de CE Delft.

Karen Killen, portavoz de Extinction Rebellion en Ibiza, explica a este periódico que se trata de un problema -la llegada de los jets privados a la isla- que se ha incrementado desde la pandemia. "Mientras estamos viviendo un incremento de precios que dificulta el acceso a la vivienda, se está produciendo la llegada de grandes fortunas, la isla se ha transformado en un destino de lujo, con mucha insensibilidad", comenta.

Killen señala que están en contacto con las instituciones públicas en Ibiza, pero de momento no ha habido ningún movimiento en la línea del anunciado por Schiphol.

En esta línea, se ha lanzado la campaña internacional Make them Pay, que busca prohibir la aviación privada, gravar a los pasajeros frecuentes y hacer pagar a los que más contaminan. También un grupo de investigadores del Laboratorio de Desigualdad Mundial ha propuesto la creación de una tasa para los ricos con más de 100 millones de dólares de patrimonio para crear un fondo climático que permita a los países en vías de desarrollo adaptarse a la emergencia climática, tal como publicó El País.

En Ámsterdam, en el aeropuerto que ahora busca prohibir los jets privados, unos 500 activistas -según Greenpeace- invadieron la pista en noviembre del pasado año. Tras saltar las vallas del aeropuerto, se sentaron bajo los jets privados para impedir su despegue, otros, circulaban en bicicleta por la pista del aeropuerto.

Cambiar el avión por el tren

La decisión de Schiphol puede marcar un precedente porque sería el primer aeropuerto en prohibir los jets privados. Sin embargo, cada vez hay más iniciativas políticas que buscan prohibir los vuelos cortos que se puedan sustituir por trayectos en tren.

En España, Unidas Podemos ha incluido como propuesta al Proyecto de Ley de Movilidad Sostenible para que se elabore un informe que estudie la viabilidad de eliminar vuelos nacionales e internacionales cuando exista una alternativa en tren en menos de cuatro horas.

Francia prohibirá los vuelos nacionales para los que exista una conexión ferroviaria de menos de 2 horas y media. Aunque no hay una fecha para su entrada en vigor, el gobierno francés ya ha recibido el visto bueno de la Comisión Europea para que aplique la medida durante tres años y evalúe su impacto transcurrido ese plazo.