Comprar un kilo de plátano de Canarias al mismo precio que uno de banana ya es posible en España. La fruta carecterística del archipiélago de la Macaronesia ha caído a valores muy próximos -e incluso iguales- en los supermercados al de su competidor extranjero, normalmente procedente de Costa Rica, Colombia y Costa de Marfil.

Según ha podido confirmar El Independiente, el plátano de Canarias y la banana se pueden adquirir por un precio exacto en Dia, a 1,49 euros el kilo, mientras que en Mercadona y Carrefour cada vez se encuentran más próximos: 1,99 €/kg para el plátano canario y 1,45 €/kg la banana en la cadena española, por los 1,69 €/kg frente a 1,4 €/kg de plátano y banana en la superficie francesa. Los datos de ASPROCAN (Asociación de Organizaciones de Productores de Plátanos de Canarias) muestran que el plátano de Canarias alcanzó al pico de 3,29 €/kg de precio medio en la Península en agosto de 2022.

El coste del plátano de Canarias para el consumidor final ha experimentado grandes cambios en los últimos tiempos. La erupción del volcán de Cumbre Vieja en La Palma arrasó con todo a su paso y 217 hectáreas de cultivo platanero de 569 propietarios de la isla quedaron sepultadas bajo la lava, así como otras 300 hectáreas de 450 propietarios quedaron aisladas o sin acceso de personas o servicios para la producción, daño que las estimaciones de la Consejería de Agricultura del Gobierno de Canarias cifraron en pérdidas ascienden a más de 100 millones de euros. El lastre en la producción platanera fue de 60 millones de kilos en 2022, algo que inevitablemente hizo crecer su precio y la cuota de mercado en favor de la banana.

Aumento de la producción

Ángela Delgado, presidenta de ASAJA Canarias, explica en conversación con El Independiente la nueva tendencia que ha estrechado el precio entre plátano de canarias y banana: "Tenemos tal cantidad de producción que estamos rozando los 9 millones de kilos semanales. Si hay mucha oferta es normal que los precios se aproximen. El problema es que los márgenes de los supermercados con nuestros plátanos son muchos mayores que los de las bananas".

La representante de los productores de plátano canario señala que precios como los de 2022 perjudican "tanto a los agricultores como a los consumidores". Delgado incide en que en una situación de inflación disparada de los alimentos "la gente se decanta más por la banana", pero cuando no es tan superior prefieren pagar un poco más por el producto nacional ya que "es más sabroso y más fresco que una banana que ha sido cortada un mes antes".

La presidenta de ASAJA Canarias destaca la necesidad de que la distribución aplique márgenes comerciales similares a la banana y al plátano canario. Los agricultores manifiestan que el extra de producción "se traduce en un mercado por el suelo para agricultores. Ahora mismo las medias al agricultor no llegan a 30 céntimos el kilo, una miseria en relación con el precio que ofrecen las superficies al consumidor". Según el Observatorio de Precios del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, en la última semana con datos, la 14 (del 3 al 9 de abril), el precio del plátano en origen es de 0,22 €/kilo.

El aumento de oferta del platano de Canarias ha provocado la consecuente bajada del precio. El descenso es tal que los productores aquejan que apenas cubren los gastos de su trabajo. Los agricultores lamentan que ellos bajan los precios para adaptarse a la coyuntura, pero que su esfuerzo no se ve reflejado en los lineales porque que consideran que las grandes superficies mantienen los valores y no los reducen al mismo ritmo.

Según Kantar World Panel, en 2022 se vendió prácticamente la misma cantidad de plátano canario que de banana (51%-49%), pero el plátano de Canarias representó el 67% de la facturación y la banana sólo el 33% restante debido a la diferencia en los márgenes mencionados. Desde ASAJA Canarias condenan que para el plátano de Canarias se margina todo el coste, mientras que a la banana a veces ni siquiera se le aplican los gastos de distribución o incluso se vende por debajo de los costes de producción.