El Corte Inglés procederá al cierre definitivo del centro madrileño de Méndez Álvaro el próximo 29 de febrero. La compañía de grandes almacenes ha comunicado ya a los sindicatos la fecha prevista de la clausura obligada por sentencia judicial.

La compañía que preside Marta Álvarez ha garantizado que el cese de la actividad comercial no supondrá merma de la plantilla de unos 600 trabajadores, que será reubicada en otros centros.

Según traslada el sindicato Valorian -antiguo Fasga- desde el Departamento de Selección realizarán entrevistas individuales con todos los trabajadores desde el 17 hasta el 31 de enero.

La compañía deberá derribar el actual edificio y, en su lugar, levantará dos torres de oficinas de hasta 27 plantas. Aunque podía haber seguido funcionando parcialmente, el grupo de distribución ha optado por el cambio de uso dentro de su plan de reordenación de sus activos inmobiliarios, por los que ha ido clausurando durante los últimos años los centros menos rentables.

La batalla judicial sobre este centro inaugurado en 1992 se ha alargado casi una década. En 2019, el Tribunal Supremo ordenó el derribo parcial de este y otros dos centros de la capital por exceso de edificabilidad.

El pasado mes de octubre, los votos a favor de PP y Vox, con el rechazo de PSOE y Más Madrid, permitieron sacar adelante la operación urbanística.