"Estamos muy a gusto en Valencia y es el mejor sitio para nuestro negocio, para nuestros depositantes y nuestros accionistas". Así ha respondido el presidente de CaixaBank, José Ignacio Goirigolzarri, a las preguntas sobre si la entidad tiene en mente volver a Cataluña, ante el debate político y la presión de Junts para intentar que las empresas que huyeron de la inestabilidad causada por el procés vuelvan a su región de origen.

Goirigolzarri ha añadido que esta visión tiene un carácter "de permanencia", como decidió el Consejo de Administración, después de la fusión entre Bankia y CaixaBank. "¿Por qué es mejor Valencia? Porque estamos en Valencia", ha añadido el presidente. "Es un lugar extraordinariamente equilibrado", ha reivindicado el directivo durante la presentación de resultados de la entidad.

"La configuración de CaixaBank mutó con la fusión, incrementando su presencia en mercados como el valenciano o el madrileño", ha justificado Goirigolzarri en términos comerciales. "Llegamos a la conclusión de que la sede social iba a continuar siendo Valencia y no lo hacíamos por razones de seguridad o inseguridad jurídica, pensábamos que era lo mejor para depositantes y accionistas y eso no ha cambiado", ha expresado.

Desde CaixaBank ven con buenos ojos el escenario de relajación de los tipos de interés que prevé el mercado para los próximos meses. De hecho, según ha indicado el consejero delegado, Gonzalo Gortázar, ya durante este mes de enero, algunas hipotecas variables de la entidad se empezarán a revisar a la baja. Lo harán, según ha dicho, una tercera parte de las hipotecas a tipo variable indexadas a seis meses.

Se revisarán un millón de hipotecas

A partir de la primavera, en mayo o junio, se empezarán a revisar las hipotecas referencias al euríbor a doce meses -el más habitual-. Las reducciones de las cuotas serán de alrededor de 20 euros, ha indicado Gortázar. En este sentido, se anticipa que las revisiones a la baja serán menos intensas que las subidas, que durante 2023 han sido, de media, de 90 euros, según ha revelado CaixaBank.

En total, la entidad revisará 300.000 hipotecas a tipo variable en el primer trimestre de este año y otras 700.000 en el segundo semestre. En total, 1 millón de hipotecados con CaixaBank comenzarán a notar en sus cuotas mensuales la relajación de los tipos de interés.

"Que los tipos bajen tendrá un impacto en las cuentas, pero mejorará la economía y la morosidad, es un escenario muy favorable", ha dicho el consejero delegado. "Eso es lo que nos interesa", ha subrayado.

Impuesto a la banca

Sobre el impuesto a la banca y la relación con el Gobierno, el presidente de CaixaBank ha dicho que "nunca han estado deterioradas. Dicho esto, la iniciativa que tomó Carlos Cuerpo de reunirse con los presidentes de los bancos va en la buena dirección, es una cosa tremendamente positiva, eso hay que admitirlo".

CaixaBank ha presentado este viernes unos resultados históricos, con un beneficio de 4.816 millones de euros, un 54% más que hace un año. No obstante, considera que este resultado no justifica la tasa. "Una cosa es que la rentabilidad se normalice como consecuencia de los tipos de interés y la otra, que se cree un impuesto a la banca. No tiene nada que ver una cosa con otra, me parece importante enfatizar que la rentabilidad no está siendo extraordinaria", ha reivindicado Goirigolzarri. La entidad pagará 500 millones de euros por las cuentas de 2023.