El paquete de 43 medidas que Luis Planas ofreció a las organizaciones agrarias para calmar sus protestas se salda con una fuerte división entre las mismas. Por un lado, se ha roto la unidad de acción que mantenían hasta ahora las tres que tienen interlocución oficial con el Ministerio de Agricultura; Asaja, Coag y UPA. Solo esta última ha firmado un acuerdo que contempla la puesta en marcha de créditos ICO por valor de 700 millones de euros, reforzar la Agencia de Control e Información Alimentaria (Aica) y medidas fiscales y de flexibilidad de la Política Agrícola Común (PAC).

También lo ha hecho la Unión de Uniones, organización responsable de la protesta que introdujo cientos de tractores en Madrid hasta las puertas del mismo Ministerio el pasado mes de febrero. Este mismo viernes, su coordinador estatal, Luis Cortés, estampaba su firma junto a la de Planas en un documento que recoge algunas de las principales reivindicaciones que les llevaron a salir a la calle.

"Hemos firmado un documento no porque creamos que es la panacea, pero es un buen punto de arranque para conseguir medidas y mejorar las condiciones de los agricultores y ganaderos de España", explicó Cortés. Al mismo tiempo reconoció que muchas de las medidas no son competencia del Gobierno de España sino de la Unión Europea. "Entendíamos que las medidas de flexibilización eran las que se podían hacer a las alturas que estamos", esgrimió en referencia al nuevo ciclo que se abre a nivel comunitario.

En este sentido, señaló la importancia del resultado de las elecciones europeas que se celebran el próximo 9 de junio. El próximo Parlamento que salga de las urnas tendrá que decidir sobre muchas de las medidas que afectan al campo. "No somos ilusos y sabemos a quién tenemos que hacer la propuesta. Hay un acuerdo de libre comercio firmado por la Unión Europea y ahí tenemos que ir", abundó Cortés.

Aunque reconocen que las medidas suponen avances, desde Coag aseguran que su negativa a firmar el documento de propuestas viene dado por una "pérdida de confianza" en Planas, debido a la presión que habría ejercido éste a lo largo de la semana para conseguir que estampasen su rúbrica en el texto que ven como una "buena declaración de intenciones" aunque con "medidas abiertas y no concretadas" en ámbitos como la ganadería o los seguros.

A última hora del miércoles, el secretario general de la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA), Lorenzo Ramos, se había adelantado al resto al firmar junto a Planas en sede ministerial el paquete de medidas al margen de las otras dos principales organizaciones agrarias. "Como representantes del sector no podíamos permitir que no se firme este acuerdo por el riesgo de que muchos de los puntos que aquí se abordan puedan caer. Creíamos que teníamos que dar ya el paso y esperamos que el resto de organizaciones se sumen pronto", señaló Ramos.

Por su parte, Asaja cree que el documento presentado por Planas es "insuficiente" para hacer frente a la "grave crisis" del sector agrario. La junta directiva nacional de la organización que preside Pedro Barato se reunió este viernes para analizar el texto donde reconoce medidas "positivas" pero también ve "carencias muy significativas en materias concretas y ausencia de medidas en sectores productivos que necesitarían una respuesta más decidida".

Barato echa de menos haber tenido información por parte de la UPA de que se iba a romper la unidad de acción que habían llevado a cabo hasta entonces. Y también deja un recado para Unión de Uniones. "Para los que decían que lo que veníamos haciendo era muy malo, de la noche a la mañana, es muy bueno y firman un acuerdo sin haber estado en la mesa de negociación. Tal vez lo que les interesaba son más aspectos políticos y no problemas del sector agrario", remarca Barato.

Democracia en el campo

"De nada vale estar todos los días en la carretera o en la Castellana si no somos capaces de resolver los problemas en una mesa de negociación", decía minutos antes Cortés. Según aseguró ante el Ministro, su intención no es pedir "que la Unión de Uniones sea la cuarta organización agraria, sino que haya democracia en el campo".

En este sentido, reclamó la aprobación de "unos criterios objetivos para que toda aquella organización agraria que entienda que los cumple se presente y sea interlocutor de la Administración. Cortés agradeció ante el titular de Agricultura que la reivindicación que llevan "haciendo muchos años se lleve a cabo con una modificación de la ley".

En este sentido, Planas volvió a expresar públicamente su intención de cambiar el actual marco normativo para actualizar los mecanismos de representación en el campo "mediante la medición por criterios objetivos".

Al margen de eso, el ministro se mostró confiado en que finalmente Asaja y Coag también acaben firmando el acuerdo. "Somos absolutamente respetuosos con los tiempos y con las formas que las distintas organizaciones agrarias tienen en su seno, por lo que en los próximos días confío y espero, que otras organizaciones profesionales agrarias se sumen a este importante acuerdo", aseguró este viernes Planas tras la firma del acuerdo con Unión de Uniones.

Este lunes, ambas organizaciones reunirán a sus órganos para trazar una hoja de ruta a partir de ahora en un contexto donde dos organizaciones ya han dado el sí a Planas y otras dos se mantienen en el no, tras un intenso ciclo de protestas y con un ciclo electoral con elecciones vascas, catalanas y europeas en ciernes.