Ni siquiera en pandemia han dejado de ocuparse. Las calles de nuestro país son ocupadas a diario por algo más de una decena de manifestaciones. Las hay de todo tipo, las que reclaman derechos laborales, las que proclaman causas sociales, las impulsadas por aspiraciones de índole política o las que, que en los últimos meses, han exigido libertad o denunciado las restricciones por la lucha contra el Covid. Sólo en 2020, el año en que el confinamiento encerró a toda la población española durante más de 40 días, y la limitación de la movilidad y las concentraciones acumulan ya un año de aplicación, en España se celebraron casi 4.000 manifestaciones autorizadas por las delegaciones del Gobierno.

A ellas hay que sumar las cerca de 2.000 que se celebraron en el País Vasco y las cientos que tuvieron lugar en Cataluña, donde sus respectivos gobiernos autonómicos tienen asumidas las competencias en esta materia.

La cifra se quedó lejos de los niveles de manifestaciones alcanzado hace dos años. En 2018, el año en el que se produjo el cambio en el Gobierno tras una moción de censura que llevó a Sánchez a La Moncloa, se celebraron 5.195 manifestaciones en todo el país, además de las llevadas a cabo en Euskadi y Cataluña. Supuso un incremento del 18% respecto al año anterior.

¿Quienes son los que más se manifiestan? Las cifras públicas del Ministerio del Interior -que incluye a 15 de las 17 Comunidades Autónomas-, revelan que los Navarros son los que con mayor frecuencia salen a la calle para reivindicar, denunciar o protestar. El año pasado en la Comunidad Foral se celebraron 384 manifestaciones comunicadas y tres no comunicadas, con un incremento del 40% respecto al año anterior.

973 en Guipúzcoa

Por delante de los Navarros se encuentran los vascos, que en priovincias como Gipuzkoa alcanzaron las 973 manifestaciones el año pasado y las 900 en Bizkaia. En alava la cifra fe de 238 marchas.

La cifra de manifestaciones de vascos y navarros, con 2,19 millones y 600.000 habitantes respectivamente, son superior incluso a la que registró Madrid, con una población casi cinco veces superior navarra, y donde 'sólo' se celebraron 358 manifestaciones -cinco de ellas no comunicadas- según los datos aportados por la delegación del Gobierno.

El nivel de manifesación de los navarros es muy significativo si se compara con algunas de la comunidades limítrofes como La Rioja. Con la mitad de población, la sociedad riojana apenas registró una treintena de marchas. En cambio, con la vecina Euskadi las cifras aportadas por la Ertzaintza revelan que las movilizaciones de los vascos también son numerosas. Si bien el criterio del registro en este caso depende de la Consejería de Seguridad, en el conjunto del País Vasco se superaron las 2.000 manifestaciónes el año pasado, cerca de seis cada día.

Ceuta y Melilla, ni una

Tras Euskadi, Navarra y Madrid el Ministerio del Interior sitúa a Sevilla con 219 manifestaciones durante el año de la pandemia. Una cifra relevante pero notablemente inferior a la alcanzada el año anterior, cuando registró la cifra más alta desde 2016 con 357 manifestaciones, casi una por día.

En sentido contrario, las provincias que menos se movilizan son Soria y Avila. En ambos casos influye su mayor dispersión geográfica y una menor población para que a lo largo del año en Soria apenas se solicitaran autorizaciones para llevar a cabo 8 manifestaciones y 16 en Avila. En las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla no consta que en todo 2020 se solicitara autorización para manifestación alguna.

En muchos casos las manifestaciones que se celebran en nuestras calles no son comunicadas ni cuentan con autorización. Este tipo de marchas se han incrementado de modo importante en los últimos años, en especial el año pasado, cuando hasta 291 manifestaciones se celebraron sin que fueran comunicadas a sus respectivas delegaciones de Gobierno. Son casi el doble de las que tuvieron lugar en 2019, en 2017 o en 2016.

Marchas no comunicadas

Quienes recurren a manifestarse sin autorización en más ocasiones son los asturianos, que lo hicieron en 27 ocasiones, seguidos por los ciudadanos de A Coruña, con 25 marchas no comunicadas, y los alicantinos con 18. En sentido contrario, Valencia y Murcia son los en ni una sola ocasión se han manifestado sin haberlo comunicado.

En la mayoría de nuestro país el recurso de la manifestación es más bien escaso. Excepto en los casos de vascos, navarros, sevillanos y asturianos, en más de la mitad de las 50 provincias españolas no se supera el centenar de manifestaciones a lo largo de un año. Es el caso de provincas como Burgos, Albacete, Ciudad Real, Cuanca, León, Palencia, Segovia, Zamora, Valladolid, Badajoz, Cáceres, Ourense, Huesca y Terual donde se produce menos de una manifestación por semana.