ERC ha vuelto a encontrarse este lunes con un sonoro portazo de JxCat en la procelosa negociación para la formación de gobierno en Cataluña. Los republicanos han anunciado hoy que este fin de semana se ha producido "un punto de inflexión" en las negociaciones gracias a un segundo encuentro de los líderes de ambos partidos en la prisión de Lledoners. Una afirmación que JxCat ha desmentido prácticamente de inmediato, aunque se muestran convencidos de que habrá pacto de coalición.

Agotado el ultimátum del 1 de mayo que ERC ha planteado desde hace dos semanas, la portavoz republicana, Marta Vilalta, ha asegurado que "tras este fin de semana en el que se cumplía" el ultimátum del 1 de mayo, "hay un cambio de tendencia, un punto de inflexión para poder formalizar Govern lo antes posible".

Vilalta, que ha utilizado la expresión "punto de inflexión" decenas de veces durante la comparecencia, ha argumentado que ese cambio en la predisposición de Junts les lleva a orillar, de momento, la posibilidad de un gobierno en solitario. Un desbloqueo que se habría escenificado en el encuentro en prisión mantenido la tarde del sábado, en el que participaron Pere Aragonés, Oriol Junqueras y Jordi Sánchez, además de los negociadores habituales por ambos partidos.

Versiones contradictorias

"No tenemos la sensación de que haya pasado nada extraordinario antes o después del ultimátum del 1 de mayo" le respondía minutos después la número tres de JxCat, Elsa Artadi. "No ha habido paradas ni puntos de inflexión" ha insistido para concluir que ese "punto inflexión" de ERC sirve "para justificar el ultimátum". O más bien las nulas consecuencias del ultimátum de Esquerra.

Artadi ha defendido que un "avance continuo en el trabajo" y que su formación ha mostrado la misma predisposición al acuerdo desde el 14F, fecha de las elecciones. "No sé si tiene que ver con el ultimátum que han explicado en la prensa y que no trasladan a la mesa" de negociación.

Tiempo perdido

Vilalta, por contra, ha responsabilizado indirectamente a JxCat de la demora en las negociaciones para insistir en una investidura ya, "cuanto antes". "Habríamos podido llegar aquí mucho antes" ha asegurado la republicana, dando por supuesto el acuerdo inminente "y evitar perder el tiempo todas estas semanas, esto nos duele porque quien sufre es la ciudadanía".

"Ojalá no hubiéramos tenido que perder todo este tiempo porque era innecesario para llegar a este punto de inflexión" ha concluido Vilalta. La portavoz de ERC ha dado por supuesto además, que en cuanto se cierre el acuerdo la presidenta del Parlament, Laura Borràs, activará una ronda de contactos exprés para acelerar la celebración de la investidura.

Consulta con las bases

Sin embargo, también en esto hay un pero de JxCat. La formación de Carles Puigdemont ha acordado hoy que cuando se cierre en un acuerdo con ERC, este debe ser validado primero por la ejecutiva del partido, y después por sus bases.

Artadi ha descartado además que esa validación se pueda llevar a acabo durante el congreso extraordinario que el partido celebrará este viernes y sábado. "El congreso ya está convocado y con una agenda fijada" ha argumentado.