En el País Vasco la preocupación ante la previsible suspensión del Estado de Alarma el próximo domingo ha llevado hoy su consejera de Sallud a alertar del riesgo que supone. Gotzone Sagardui ha señalado que no contar con esas herramientas para limitar la movilidad supone un riesgo importante, más aún en una situación como la que atraviesa Euskadi con la cuarta ola aún en niveles muy elevados: "Es prematuro dejar caer las medidas que tenemos. Cuanta más movilidad, más contagios".

Pese a que el incremento de la incidencia se ha moderado en los últimos días, la pandemia continúa situando al País Vasco a la cabeza de la incidencia en esta cuarta ola. Sagardui considera que debemos seguir aún "alerta": "No podemos decir aún que lo peor ha pasado". Ayer el porcentaje de positivos aún se situaba en un 7,2% de los test realizados y el último dato de incidencia acumulada se situaba el pasado viernes en los 532 casos por cada 100.000 habitantes.

La preocupación se centra en la situación de los hospitales, donde ayer ingresaron otras 59 personas infectadas de Covid. Las UCI registran 189 personas infectadas.

Una situación que supone un elevado tensionamiento del sistema hospitalaria, según ha reconocido la consejera Sagardui, quien ha augurado que el escenario se mantendrá así durante varias semanas: "Aún necesitaremos dos o tres semanas para ver si el ligero descenso de los últimos días se traslada a los hospitales, no nos podemos aventurar a decir qué pasará", ha señalado en declaraciones a Euskadi Irratia.

Vacunación al alza

Respecto a las razones que han hecho que Euskadi lidere la incidencia de esta ola, Sagardui ha señalado que no se puede explicar por una sola razón sino por multitud de ellas. Ha recordado que el País Vasco fue la última comunidad autónoma en padecer el repunte de esta ola y por ello sereá la última en dejarla atrás. Ha añadido que se han producido además elementos como las vacaciones o las concentraciones sociales incmpliendo las medidas y que habrían contribuido a elevar la incidencia.

La vacunación también ha sido uno de los aspectos en torno a los cuales la gestión del Gobierno ha recibido críticas. Sagardui ha apuntado que la evolución de los procesos de inoculación no han ido más rápido no por incapacidad de administración del sistema sanitario sino por no disponer de suficientes dosis. La semana pasada el País Vasco inoculó 160.000 vacunas, la cifra más elevada en una semana desde el inicio de la vacunación en diciembre.