El 'número 2' de Policía dice que se enteró de que Ghali estaba en España por la prensa cuatro días después

El Director Adjunto Operativo (DAO) de la Policía Nacional, José Ángel González Jiménez, ha asegurado este lunes ante el juez que se enteró por la prensa de que Brahim Ghali se encontraba en España para ser tratado de covid-19. Fue, según ha dicho, cuatro días después de que el líder del Frente Polisario aterrizara en Zaragoza y fuera trasladado en ambulancia hasta un hospital riojano.

El número dos de la Policía ha declarado por videoconferencia en calidad de testigo ante el juez de Zaragoza que investiga la entrada en el país de Ghali vulnerándose presuntamente el código de fronteras Schengen y eximiendo de pasar por el control de pasaportes al presidente de la República Árabe Saharaui Democrática (RASD). Éste ingresó en el Hospital San Pedro de Logroño bajo la identidad ficticia de 'Mohamed Benbatouche'.

Ante el "escaso aporte probatorio" realizado por los departamentos ministeriales relacionados con este episodio, el magistrado Rafael Lasala quería escuchar el testimonio del DAO de la Policía para tratar de avanzar en el esclarecimiento de la forma en que Brahim Ghali llegó el pasado 18 de abril a España, donde permaneció hasta que regresó en la madrugada del 2 de junio.

Según fuentes jurídicas consultadas por El Independiente, José Ángel González Jiménez ha dicho que su conocimiento de los hechos que se investigan se limitan a la llamada que le hizo el 18 de abril del pasado año el comisario general de Información (Eugenio Pereiro) para comunicarle que un líder del Frente Polisario -sin precisar que era Ghali- iba a entrar por Zaragoza. El DAO ha añadido que no compartió dicha información con ningún superior y que fue el citado mando el que organizó el dispositivo de protección y vigilancia desde la Base Aérea de Zaragoza -donde aterrizó el avión- hasta el hospital riojano en el que estuvo ingresado durante 45 días tras contagiarse por coronavirus.

De esta forma, el número dos de la Policía corrobora el testimonio que el comisario general de Información ofreció cuando testificó el pasado 29 de noviembre. Bajo obligación de decir verdad, Pereiro negó que se hubiera enterado de la llegada de Ghali por una vía oficial e insistió en que tuvo conocimiento de ello por el chivatazo de un confidente, invocando la Ley sobre secretos oficiales para mantener la reserva de la fuente.

Identificación en el hospital

El juez de Zaragoza que ha tomado declaración como testigo a González de la Policía busca despejar con esta investigación quién ordenó autorizar la entrada del líder del Frente Polisario en España sorteando el control de pasaportes, con una identidad falsa y "transgrediendo" el código de fronteras Schengen. Considera que con la actuación del Gobierno para permitir la entrada del presidente de la República Árabe Saharaui Democrática para ser atendido "por razones humanitarias", como argumentaron desde el Ejecutivo, se pudo incurrir en la posible comisión de delitos de prevaricación y falsedad.

De momento, en la causa ya está siendo investigada la exministra de Exteriores Arantxa González Laya, a quien el instructor ha reprochado precisamente que se ampare en la Ley de Secretos Oficiales para no despejar quién dio la orden de cómo se debió facilitar la entrada del líder polisario por la Base Aérea de Zaragoza y su traslado al Hospital San Pedro de La Rioja.

También ha declarado este lunes como testigo el inspector jefe del Grupo de la Comisaría General de Información al que el juez de la Audiencia Nacional ordenó que identificara a la persona que había ingresado en el Hospital San Pedro de Logroño. Esa pesquisa permitió conocer que Ghali se había registrado en el centro sanitario como 'Mohamed Benbatouche'.

El mando policial ha indicado que no fue hasta el 5 de mayo de 2021 cuando tuvieron conocimiento oficialmente de la presencia del líder del Frente Polisario en España, a pesar de que la prensa ya informó el 22 de abril de que la persona que había ingresado en el Hospital San Pedro era Brahim Ghali. Cuestionado por esa circunstancia, el inspector jefe ha defendido que la información periodística suele ser sesgada y parcial, según las fuentes.