Se trataba de un riesgo controlado en el que todos los actores implicados ganaban. ERC salvaba la cara en Cataluña ante el caso del supuesto espionaje a más de una sesentena de líderes del procés y sus entornos mientras que EH-Bildu volvía a erigirse en socio indispensable del PSOE, para disgusto del PNV. Y todo ello, mientras ponían a salvo el decreto de medidas urgentes en el marco del Plan Nacional de respuesta a las consecuencias económicas y sociales de la guerra en Ucrania, cuya derogación hubiera tenido el efecto inmediato, mañana mismo, de terminar, por ejemplo, con la rebaja de los 20 céntimos de euros en el litro de gasolina.
La decisión de Bildu, anunciada por su portavoz, Mertxe Aizpurua, de votar a favor del plan de respuesta, centró los titulares de la jornada parlamentaria de este jueves marcada por otra votación que amenazaba infarto para Moncloa.
Y la decisión de Bildu resultaba sorpresiva también por el contraste con la posición de ERC, formación política con la que tiene firmado un acuerdo de colaboración en el Congreso de los Diputados. Los republicanos independentistas necesitaban marcar distancias con el Ejecutivo por el caso Pegasus y, no menos importante, por las presiones brutales ejercidas por su socio de gobierno en la Generalitat, Junts, empeñados en que rompan toda relación con el Ejecutivo central.
ERC sufre las presiones de sus socios en la Generalitat que le exigen rompa con Sánchez
Así que ambas formaciones pactaron la mejor salida posible, según fuentes independentistas, esto es, hacer posible la convalidación el decreto pero sin dejar de pedir responsabilidades políticas y judiciales por el caso del espionaje. De hecho, el presidente de la Generalitat, Pere Aragonés, ha exigido ya la cabeza de la ministra de Defensa, Margarita Robles, por su intervención el miércoles en la sesión de control justificando las escuchas del CNI en los intentos de ruptura de la legalidad constitucional de los cabecillas del procés.
En definitiva, para los de Oriol Junqueras haber permitido en estas circunstancias la aprobación del decreto acarreaba unos costes políticos enormes, a pesar de estar de acuerdo con su contenido. Mientras, para Bildu, lejos de ser lesivo su voto a favor, les coloca en la posición que llevan intentando ocupar toda la legislatura, esto es, la de aliado fiable, capaz de arrancar concesiones y apoyar políticas sociales. Todo ello para disgusto de un PNV convertido cada vez más en actor secundario.
Desde EH-Bildu justifican el "no" de ERC por el "asunto gravísimo" de las intervenciones telefónicas, pero reivindican, "por sentido de la responsabilidad", su voto afirmativo "porque los ciudadanos no tienen la culpa de los errores del Gobierno" en este asunto, aducen. Un difícil equilibrio en el que ha habido un reparto de papeles dentro de su unidad de acción parlamentaria.
Acuerdo de colaboración
ERC y EH Bildu firmaron tras las elecciones generales del 28 de abril de 2019 un acuerdo de carácter estratégico destinado a coordinarse en el Congreso, Senado y Parlamento Europeo, al que concurren en listas de coalición. La alianza se solemnizó en Ginebra (Suiza) por la secretaria general de ERC y prófuga, Marta Rovira, y el coordinador general de EH-Bildu, Arnaldo Otegi. Posteriormente, Pedro Sánchez convocó de nuevo elecciones el 10 de noviembre tras su negativa a pactar con Unidas Podemos, aunque la alianza ERC-Bildu se mantuvo.
Si bien no es la primera vez que votan distinto en el Congreso, en las citas parlamentarias de gran calado suelen coordinar el sentido de su voto, y esta vez no ha sido diferente aunque se hayan situado en lados distintos del tablero. Tampoco hay que perder de vista la interlocución con Unidas Podemos, cuyo grupo "habla casi todos los días con ERC y Bildu", recuerdan en este caso desde UP. Los morados, también muy críticos, con el caso del espionaje, intermediaron para sacar adelante el real decreto, y es que no pocas veces las tres formaciones coordinan su estrategia en un frente amplio "en el que sumamos 51 diputados", subrayan.
Los socialistas se acostaron la noche de miércoles con la certeza del "sí" de los de Bildu y el "no" del PP, según se lo comunicó la portavoz popular, Cuca Gamarra, al ministro de la Presidencia, Félix Bolaños. Pero los números les salían salvo sorpresas como la de la reforma laboral.
En este caso, el Gobierno estaba algo más tranquilo a pesar de esos antecedentes. Aducen que si bien creyeron entonces tener amarrado el voto de los dos diputados de UPN, Carlos García Adanero y Sergio Sayas, aquello era "un apoyo antinatural" por el carácter conservador de esta formación política que se presenta en alianza con el PP en Navarra. Pero para el plan de respuesta, todos los partidos que comprometieron su voto o son del mismo espectro ideológico o ya se han significado en otras votaciones a favor del Gobierno.
Te puede interesar
Lo más visto
- 1 Interior se persona en la causa contra el teniente coronel de OCON
- 2 Zambudio, el empresario murciano de los mil negocios
- 3 Esto es lo que Hacienda nunca podrá embargarte
- 4 La eterna lucha de España por ampliar sus fronteras marinas
- 5 ¿Cual es el mejor Treonato de Magnesio? Estas son las 7 mejores del mercado
- 6 Corinna y el principio del fin. Por Casimiro García-Abadillo
- 7 Cuando la princesa almorzó con los cocineros del Club Financiero
- 8 El sanchismo mediático ha quedado retratado
- 9 El jefe de RRHH de RTVE lo era en INECO cuando entró Jessica