Primeras reacciones desde el Grupo Socialista a cuenta del 'caso Mediador' y la implicación del ya exdiputado canario Juan Bernardo Fuentes en prácticas calificadas de "inmorales" por estar vinculadas al consumo de alcohol, prostitución y drogas. Tras el órdago lanzado por el Partido Popular (PP) esta mañana, en la que exigían explicaciones al principal grupo de la cámara baja, el socialista portavoz Patxi López se ha visto en la obligación de entrar en materia. Tal y como ha reconocido el diputado vasco, no ha habido una investigación oficial dentro de las dependencias socialistas, pero sí "conversaciones". Y la principal conclusión a la que se ha llegado internamente, es que "no hay ningún otro diputado que se haya deslizado por la pendiente de la corrupción" ni de "comportamientos deshonestos".

Sin embargo, López no ha amagado por cerrar la cuestión. De hecho se ha pronunciado en un ejercicio de ejemplaridad expresando que si se encuentra alguna prueba que implique a otros diputados, estos serán expulsados del grupo y del PSOE. Ello abre la posibilidad a que salgan a la luz nuevos nombres, dado que la investigación judicial sigue vigente.

El parlamentario ha entrado en la sala de prensa del Congreso sabiendo que tendría que lidiar con una cuestión de peso que se une ya al desgaste por los roces con Unidas Podemos por la reforma de la ley del 'solo sí es sí', por ejemplo. Ha decidido iniciar su intervención aludiendo a la moción de censura y estableciendo una dicotomía entre la postura del Gobierno, propositivo en mejorar la vida de la ciudadanía, ha señalado a la par que ha enumerado los "logros" del Ejecutivo en la legislatura como la subida del SMI, entre otros, y después, se ha referido a la trama del 'Tito Berni'.

"En cuanto conocimos un posible caso de corrupción, actuamos. Y ese diputado entregó el acta. Eso es lo que vamos a hacer si hay mas". Porque "no hay cosa que más repugne a un socialista que la corrupción", ha mencionado López, que ha opinado inmediatamente después sobre la postura que está adquiriendo el PP en esta cuestión. "En cualquier ámbito puede haber corrupción, pero la diferencia es cómo se actúa", ha añadido. A su juicio, mientras que el PSOE ataja cualquier caso, los populares ejercen "compadreo" y "se hacen fotos". Y como muestra de ello ha señalado a la alcaldesa de Marbella, que repetirá como candidata a las próximas elecciones y está investigada por haber elevado su patrimonio durante su cargo hasta los 12 millones de euros. En ese sentido, López se ha referido, además, al presidente del Consell de Ibiza Vicent Marí, con quien Alberto Núñez Feijóo comió este pasado domingo y que está investigado por delitos de prevaricación administrativa y tráfico de influencias.

El PSOE no cierra la puerta a que en plena investigación puedan aflorar más nombres, aunque por el momento no les consta. Afirman que solo pueden controlar la actividad de sus parlamentarios en el hemiciclo

Preguntado por si impulsarán una comisión parlamentaria de investigación sobre ese asunto, el portavoz socialista considera que no "corresponde" a su partido, al estar sujeta ya a una investigación judicial. En cuanto a la consulta sobre el "control" que el Grupo tiene sobre la actividad de sus diputados, López la limita a las funciones parlamentarias, no "de puertas para fuera" ni en cuanto a las conversaciones que se puedan tener internamente en las instalaciones de la cámara baja. Ni si quiera se tiene constancia en el registro de entradas a las Cortes, dado que solo se requiere el nombre y el DNI, no el ámbito laboral al que se dedica. Sin embargo, después de mostrar su posición, el portavoz ha resaltado la importancia de impulsar la regularización de las capacidades de los grupos de presión en la política. Y para ello, se necesitan a los "otros grupos".

Posteriormente, López ha insistido en que este tipo de comportamientos, los atribuidos al exparlamentario Fuentes y al resto de involucrados en el caso, "son incompatibles" con los valores que representan al PSOE. "Y si las hacen, se tienen que atener a las consecuencias", ha remarcado con afán de contundencia. Ahora bien, el socialista ha diferenciado que "una cosa es ir a una cena y otra es corromperse", incidiendo que para estos segundos la "expulsión" será el camino a seguir. "No resto ni quito importancia [a la cena celebrada en pleno confinamiento en el Ramsés de Madrid]... no quiero hablar de esto", ha dudado López. Que sin embargo, ha dejado constancia de que algunos diputados que hayan podido estar en contacto en esos eventos con Fuentes sí les habrían llamado para hacer aclaraciones. Fuentes socialistas apelan al menos a cinco diputados de los hasta quince que se barajan en distintas publicaciones.

Gamarra advierte de "los nervios en el PSOE"

Inmediatamente después de que López abandonara la sala, la secretaria general del PP y su portavoz en las Cortes, Cuca Gamarra, ha entrado en escena y ha recalcado sobre la intervención del socialista: "Creo que salir corriendo de la sala para no dar explicaciones es el mejor reflejo que denota los nervios del PSOE. Faltan explicaciones y pedimos transparencia". Ha proseguido advirtiendo que el PSOE "parece conocer el nombre de algunos diputados, y se ocultan". "Hace falta saber sus nombres", por cree Gamarra que el silencio está desprestigiando al resto de parlamentarios. Y respecto a las palabras de López, considera que "no se puede decir que dan igual las cenas" o "desviar la atención sobre algo que no debería haber ocurrido" a la influencia de los lobby "cuando el problema está dentro del PSOE".

La 'dos' de Génova no ha descartado más iniciativas parlamentarias como puede ser la solicitud de una comisión de investigación, aunque por el momento se ha remitido a las ya anunciadas previamente a primera hora de la mañana por la diputada popular Belén Hoyo. Éstas, de momento, se limitan a incorporar un requerimiento de comparecencia del ministro de Exteriores José Manuel Albares [se habrían usado algunas embajadas para los negocios de la trama, en la que está vinculada el general de la Guardia Civil Francisco Espinosa Navas] y ha trasladar una batería de preguntas a los organismos dependientes del ministerio de Asuntos Económicos, Interior, Defensa y Exteriores. A ello, se añade el aprovechamiento de las comparecencias a la vicepresidenta Nadia Calviño en el Senado y a las de los ministros Fernando Grande-Marlaska y Margarita Robles en el Congreso, para incorporar preguntas al respecto.