Que sigue siendo baja lo saben en Ferraz y en Moncloa, pero que haya una visible progresión en las encuestas en lo que respecta a la fidelización de voto, es un aliciente más para el PSOE, que habla de remontada en las urnas el próximo 23-J. Ese incremento también queda reflejado en las encuestas publicadas estas semanas. En la última quincena de junio y la primera semana de julio, los socialistas han crecido una media de once escaños. La media de El Independiente, que recopila todos los sondeos privados que han visto la luz en ese periodo, percibió un incremento de 95 a 100 escaños de media en el cierre de mes, ascendiendo a 106 en este inicio de campaña de elecciones generales.

La barrera de los cien escaños de media se le ha resistido notablemente al PSOE en lo que va de año, coincidiendo con legislaciones como la derogación del delito de sedición, la rebaja de la malversación o la ley del 'solo sí es sí'. Solo ha tenido picos ligeramente superiores a ojos de las encuestadoras 40dB y GAD3. Unos picos que ahora empiezan a atender el grueso de publicaciones.

A raíz de ello, el PSOE afronta los comicios nacionales con ganas. Y así lo están dejando ver en cada mitin. "Se respira ilusión, ganas y esa remontada que, cada día, es más real y más posible", dijo por ejemplo la ministra de Educación, portavoz nacional socialista y candidata de la formación por la lista de Zaragoza. Lo hizo en la presentación del programa electoral del PSOE, de claro diseño continuista y sin carga ideológica para buscar situarse en la centralidad en competencia con el PP.

40dB, que mensualmente es una de las pocas encuestadoras privadas que aporta transferencia de voto permanente, además de dar una de las horquillas más alta de representación [104-118], hace hincapié en su barómetro de julio en que el PSOE consigue la tasa de fidelidad del año entre sus votantes de noviembre de 2019 más alta en la previa a las generales del 23 de julio. Un hecho que coincide con la campaña de movilización de la izquierda ante los acuerdos regionales y municipales de PP y Vox, y el circuito mediático protagonizado por el presidente del Gobierno para mejorar su imagen. En esta segunda mitad de legislatura, el mejor dato para el PSOE fue de un 72,7% en marzo de 2022, en plena crisis del PP y previa entrada de Alberto Núñez Feijóo como presidente popular. Y aguantó por encima del 68% hasta junio.

El PSOE repunta de junio a julio seis puntos de fidelidad de voto, de un 62,3% a entre el 70 y el 73%"

En los cinco primeros meses del año, la media de afinidad de votantes que ya apostaron por la papeleta socialista ha sido del 67%. En junio, tras las municipales y autonómicas y una caída considerable al 62,3%, la movilización alentada por Sánchez ha devuelto al PSOE a tasas similares a la máxima de 2022. En su encuesta preelectoral, 40dB daba a Sánchez un 68,8% de confianza entre sus votantes, que cinco días después, en el primer tracking de la encuestadora ha ascendido a 71,4%. Este sábado, el segundo tracking percibía una variante de 1,5 puntos menos. La media deja al PSOE con 70,65% de media.

El corte progresista de la entidad y su colaboración con el Grupo Prisa, podría dar una imagen de afinidad con la candidatura del PSOE, pero GAD3, que trabaja con el diario ABC y NIUS, en su único tracking que, de momento, se ha referido directamente al trasvase de voto, establece en un 73% esa cifra. Es más, levanta las posibilidades del PSOE hasta los 115 escaños.

Sorprende que en este punto de crecimiento, con todo, el CIS de Tezanos, el único barómetro que desde julio del año pasado ha dado al PSOE por encima, solo apunte a un repunte de 2 puntos entre junio y julio hasta situarse en el 64,4% de fidelidad de voto. Todo cuanto la evolución desde enero a mayo ha sido la siguiente: 64,5%, 66,1%, 68,1%, 63,3% y 63,5%. Sánchez queda lejos del dato de 40dB y GAD3. Más baja la percibe SigmaDos para El Mundo, que a contracorriente del resto de encuestas y en beneficio de Sumar, destacan un decrecimiento de la fidelidad en el PSOE. Ésta pasó tras el 28-M del 63,7% al 66,7% a mediados de junio, y empezó a caer al 64,4% en julio y al 62,3%, 61,5% y 62,6% en su tracking diario.

En todo caso, cogiendo la tasa más elevada, con esos 70,65% o 73% de 40dB y GAD3, de los 6.792.199 votos logrados el 10-N de 2019, el PSOE mantendría entre 4,8 o 4,95 millones de sufragios. Compensaría las fugas con 1,88 millones de votos de la abstención (15,1%) y otros 800.000 de Unidas Podemos y Ciudadanos aproximadamente. Superaría los 7,5 millones de votos en detrimento de los extremos, con un PP por encima favorecido por el trasvase naranja, la abstención, y las fugas de Vox y el propio PSOE.

PP y Vox, partidos con la fidelidad más alta

Aunque las dos grandes fuerzas del espacio de la derecha representan a los partidos con mayor fidelidad de respaldo en urnas, a lo largo del año se ha producido un cambio en el que Vox, siempre por encima del 80%, ha perdido la primera posición en favor del PP. Solo 40dB sigue percibiendo a los ultraconservadores en torno al 87% con el PP en un 81%, algo por debajo tras las municipales y autonómicas y con Vox desatado. Para la entidad que lidera Narciso Michavila, GAD3, no obstante, hay un cambio de roles, donde un 86% del electorado del PP confiaría en Feijóo y un 82% en Santiago Abascal.

El descenso de respaldo entre votantes confirmados lo refleja igualmente SigmaDos, algo que se percibe con mayor detalle en los últimos días a través de su tracking diario. De la encuesta de finales de junio a principios de julio, la encuestadora ha pasado de dar a PP y Vox 81,5% y 74,8%, a un 79,2% y un 71,8% respectivamente. El CIS, por su parte, refuerza unas décimas al PP hasta un 76,6%, mientras que mantiene firme a Vox con un 75,5%. Sumar, se garantiza entre 40dB, GAD3 y SigmaDos un 61-65%. El CIS le atribuye al menos la mitad del electorado de Unidas Podemos.