El anuncio de Vox de no plantear su entrada en un hipotético Gobierno de Feijóo para facilitar así su investidura no cambia nada para el PNV. La formación nacionalista ha asegurado esta mañana que ante los intentos de "algunos sectores políticos y mediáticos, tanto de Euskadi como en España, de construir una realidad alternativa", se ve en la necesidad de "refrescar su memoria". Lo hace para remitir a quienes alimentan la posibilidad de un cambio de posición del PNV a lo anunciado por el presidente del partido, Andoni Ortuzar el pasado 24 de julio cuando aseguró que su formación ni siquiera accedería abrir conversaciones con el PP.

El PNV recuerda ahora que ese día el Euzkadi Buru Batzar, la dirección del partido, fijó la posición "con meridiana claridad" y que esta no habría cambiado en nada tras los últimos movimientos en los procesos de negociación abiertos entre partidos. En aquella ocasión, tras un mensaje recibido por Ortuzar del presidente del PP, el líder de los nacionalistas contestó trasladando a Feijóo que el PNV ni siquiera accedería a dialogar o verse con el dirigente popular.

Durante la campaña y tras los resultados del 23-J, el PNV ha subrayado que el candidato del PP no tiene posibilidades de salir adelante en un proceso de investidura y que el PNV no participará en ninguna fórmula en la que tenga una participación directa o indirecta Vox. Una cuestión que incluiría formar parte del grupo de partidos en los que el PP se tuviera que apoyar para sacar adelante una investidura de Feijóo, sin que ello tuviera que conllevar además la entrada en un futuro gobierno de la formación de Abascal.

El propio presidente del PNV, Andoni Ortuzar, aseguró en declaraciones a 'El Independiente' que Feijóo llevaba ya una pesada "mochila" tras sus acuerdos autonómicos con Vox que suponían haber traspasado "líneas rojas" para el PNV. En el análisis postelectoral que ha hecho el PNV se destaca que el electorado vasco ha votado de modo muy mayoritario contra cualquier influencia de Vox en la política vasca y que por eso ellos secundarán lo que consideran que es una demanda mayoritaria de la ciudadanía en Euskadi.

El PNV se enfrenta en menos de un año a un proceso de elecciones autonómicas en el que una posible participación en fórmulas que permitieran un Gobierno de Feijóo con el apoyo de Vox consideran que serían muy perjudiciales para sus intereses electorales. Unos comicios en los que el PNV deberá saber revertir la pérdida de apoyos que arrastra tanto en el 28-M como el 23-J.