El 13 de diciembre de 2024, el coronel de la Guardia Civil, Diego Pérez de los Cobos, pasará a la reserva, dejando la primera línea de acción. Hasta entonces tiene posibilidad de ascender a general y quedarse en la Benemérita, como mínimo, otros cuatro años más. Pero conseguirlo no será fácil.

Este martes se conocía la decisión del Tribunal Supremo sobre las tres veces que Marlaska frenó el ascenso del uniformado. La sentencia, cuyo contenido íntegro se conocerá en los próximos días, señala hasta que el Ministerio tiene que revertir hasta tres ascensos que promocionó por delante de Pérez de los Cobos: se trata de Francisco Javier Sánchez Gil, Arturo Prieto Bozec y Antonio José Rodríguez Medel Nieto.

Desde la Unión de Oficiales, la asociación que agrupa a los mandos en el Cuerpo, muestras su alegría a "que se reconozca que" el coronel "recibió un trato injusto pero también nos preocupa que por el mal hacer del Gobierno terceros se vean perjudicados, como ocurre con los nuevos generales que han sido nombrados y que no tienen culpa de esos errores", explican a El Independiente las fuentes consultadas.

El bloqueo político, con una legislatura que no termina de echar a andar, y la posible continuación de Fernando Grande-Marlaska al frente del Ministerio del Interior hacen complicado el ascenso del coronel. Su entorno es pesimista sobre las posibilidades de vestir el fajín rojo de los oficiales generales.

Los tiempos juegan en contra del coronel De los Cobos. El año que viene, en diciembre, cumplirá 61 años. Es el año en el que tendría que pasar a la reserva. En caso de ascender, podría estar cuatro años más como general de brigada, seis si volviese a ascender a general de división o diez si se le nombrase teniente general.

Proceso de ascenso

El proceso para ascender a general siempre se ha respetado desde el número 5 del Paseo de la Castellana, sede del departamento que dirige Marlaska. El Consejo de la Guardia Civil, formado por los generales y las asociaciones representativas, hace una lista con los coroneles que más méritos reúnen para ser generales. Se hace mediante un criterio objetivo basado en la antigüedad, méritos o condecoraciones, entre otros valores.

El listado se envía al Ministerio del Interior, que suele aprobarlo sin poner muchas objeciones, respetando este sistema interno. Marlaska, por el contrario, se lo ha saltado hasta en tres ocasiones con Pérez de los Cobos, y otra más con toda una promoción de generales al ascender a David Blanes. Nada hace pensar que el ministro no pretenda dilatar el proceso del nombramiento.

Fuentes de la Guardia Civil no dudan al decir que el rechazo al ascenso del coronel que se encargó del dispositivo del 1 de octubre de 2017 parte de un rechazo personal del ministro. En marzo de 2020, De los Cobos, al frente de la Comandancia de Madrid, y su equipo investigaban, por orden judicial, las manifestaciones del 8 de marzo y su relación con la propagación del Covid.

Una jueza de la capital decretó la causa como secreta, por lo que los agentes sólo podían informarla a ella directamente. En la investigación estaba investigado el entonces delegado del Gobierno en Madrid, José Manuel Franco. Al enterarse Marlaska, pidió información de primera mano al coronel a través de la entonces directora de la Guardia Civil, María Gámez. De los Cobos se negó, porque de lo contrario incurriría en un delito, y le cesaron de su puesto. En su lugar, tras negarse varios coroneles, Interior colocó, precisamente, a David Blanes, quien se vio posteriormente beneficiado por un ascenso a general que no le tocaba por promoción.

Varapalos judiciales a Marlaska

Marlaska cosecha una serie de varapalos judiciales desde que fuese nombrado ministro del Interior. De los Cobos le ha ganado dos veces en los tribunales. La de este martes, sobre su ascenso a general, y en otra ocasión, también en el Supremo, sobre su destitución "ilegal" aquel marzo de 2020. El Ministerio se ha visto obligado a restituirle al frente de la Comandancia de Madrid.

Pero también ha recibido un revés de la Justicia en cuanto a la entrega de medallas a comisarios retirados. Hace dos años, la Policía dio medallas a cuatro comisarios jubilados. Varios sindicatos, entre ellos el mayoritario Jupol, recurrieron a la Justicia. El Juzgado Central de lo Contencioso-Administrativo número 11 de la Audiencia Nacional terminó anulando los distintivos por falta de claridad del procedimiento al no explicitarse los requisitos que concurrían en cada mando para ser premiado.

A principios de junio de este año, la Dirección General de la Policía, confirmó a las organizaciones sindicales de que entregarían la medalla de plata a seis comisarios que ya no prestan servicios, entre los que estaban los anulados por la Justicia. Estas condecoraciones, que se entregan cada año en el Día de la Policía, conllevan un 15% de incremento en la pensión. Según las fuentes consultadas, la cuantía rondaría los 250 euros al mes, según los trienios de cada comisario.