La negociación con Junts per Catalunya ha tropezado en la ultimísima curva. Por la ley de amnistía. Félix Bolaños lo reconocía este jueves por la tarde desde Barcelona, tras firmar el acuerdo con ERC con Oriol Junqueras a su lado. El titular de la Presidencia en funciones, uno de los tres negociadores principales de Pedro Sánchez —junto a Santos Cerdán y a María Jesús Montero—, admitió que no hay acuerdo cerrado todavía con la formación de Carles Puigdemont, aunque sí manifestó su convicción de que se alcance "bien pronto". No fijó, eso sí, ningún horizonte temporal.

Bolaños compareció en la sede del PSC junto al primer secretario del partido, Salvador Illa, en una muestra, tal y como este dijo, de la "unidad" de los socialistas en esta complejísima negociación con los independentistas catalanes. El ministro, tras detallar los principales puntos del acuerdo con ERC, de 14 páginas [aquí en PDF], señaló que esa alianza también incluye la aprobación de una ley de amnistía que "devolverá a la política lo que nunca debió salir de la política" y que todavía se está "ultimando con otras fuerzas", en referencia a Junts.

Las negociaciones siempre son discretas y cuando hay acuerdos, transparencia, se explican y se publican", explica Bolaños

No quiso indicar Bolaños, a preguntas de los periodistas, cuál era el escollo que entorpecía el cierre del pacto con los de Puigdemont. "Es una negociación en curso. Permítanme que sea discreto en todos los aspectos", se excusó, para añadir que "tan pronto" como se cierre el acuerdo con Junts —aquí sí citó el nombre del partido—, que espera que sea "bien pronto", los socialistas comparecerán y lo explicarán, igual que estaban haciendo Illa y él para dar cuenta del texto firmado con ERC. "Si alcanzamos el acuerdo", concedió. Las conversaciones, por tanto, siguen en marcha, sin que haya garantías al cien por cien de que culminen con éxito. "Las negociaciones siempre son discretas y cuando hay acuerdos, transparencia, se explican y se publican", subrayó, y reiteró la voluntad del PSOE de que "la ciudadanía conozca hasta la última coma" de lo que se haya pactado.

Y como no está cerrada la negociación con Junts, el PSOE no puede ni quiere explicar nada todavía acerca de la ley de amnistía, más allá de que será una norma que hará una "sociedad más habitable", porque la obligación de un Gobierno es "garantizar la convivencia allí donde se fracturó y tomar medidas, y todo en el marco de la Constitución y de la ley".

Desde Ferraz señalan que los dos partidos, PSOE y Junts, se han dado "unas horas" de pausa "de común acuerdo, para luego seguir hablando"

En Bruselas, la conclusión era la misma. Allí se reunió la dirección permanente de Junts, con Puigdemont al frente. El encuentro acabó sobre las 18.30 horas y, como explicaron fuentes de la formación a Europa Press, no se llegó a un pacto con el PSOE, de modo que seguirán "negociando". "Se deberá esperar, como mínimo, a mañana [por este viernes, 3 de noviembre]", indicaron las mismas fuentes. La cita se produjo en el hotel Thon de la capital comunitaria.

Fuentes de Ferraz indicaron a este periódico que las dos partes, PSOE y Junts, se han dado "unas horas" de pausa "de común acuerdo, para luego seguir hablando".

Illa, mientras, expresó su "satisfacción" por estar "más cerca" de la reelección del líder socialista y advirtió de la necesidad de cerrar un acuerdo con otras formaciones —léase Junts— para "no dar ninguna opción ni a la derecha ni a la ultraderecha". "Hoy la inmensa mayoría de catalanes apostamos por el reencuentro total", apostilló el primer secretario del PSC, para quien se trata de abrir "una nueva etapa" que deje atrás la "ruptura política que se convirtió en ruptura social".

En lo que afecta al acuerdo cerrado con ERC, Bolaños remarcó que no se trata solo de un apoyo de los republicanos para la investidura de Sánchez, sino que también se comprometen a "garantizar la estabilidad" del nuevo Gobierno. Es decir, que se trata de un pacto de legislatura, tal y como anhelaban los socialistas.

"Seguimos avanzando rumbo a la investidura de Pedro Sánchez y rumbo a una legislatura estable de progresos, avances y convivencia", destacó el ministro, quien agradeció el "compromiso de ERC con la gobernabilidad y la estabilidad" de España, a través de una investidura que permitirá "abrir una nueva etapa", "pasar página" del pasado. Las dos formaciones "ratifican su apuesta clara por el diálogo y los acuerdos como la única manera de resolver los conflictos". A ello se suma el compromiso con la mejora de los servicios públicos —a través del traspaso de Rodalies— y la mejora de los recursos para Cataluña, con una condonación parcial de la deuda catalana (unos 15.000 millones de euros, que supondrán un ahorro de 1.300 millones en intereses).