El PP ha elevado el tono este lunes en plena resaca del éxito de las manifestaciones en contra de la Ley de Amnistía. Fiel a su estilo, el vicesecretario de Organización del PP, Miguel Tellado, ha sugerido que el presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, "debería irse de este país en un maletero por permitir esta humillación", en recuerdo a lo que hizo en 2017 el hoy ex presidente de la Generalitat Carles Puigdemont para sustraerse de la acción de la Justicia tras desafío soberanista. A continuación, a preguntas de la prensa en la sede del PP, ha justificado que se trataba de "un chascarrillo en relación al engaño masivo de presentarse a las elecciones defendiendo una cosa y al día siguiente hacer exactamente lo contrario", sin dejar de llamarlo el "presidente trampas".

También ha aludido Tellado al presidente de Castilla-La Mancha, el socialista Emiliano García Page, quien no ha ahorrado en críticas públicas a la ley de amnistía. Cree Tellado que la futura aprobación de la ley de impunidad "le perseguirá el resto de su vida política. No tiene principios y está dispuesto a tragar con todo. Pretende engañar diciendo una cosa y haciendo la contraria. Que se deje de teatrillos". Hasta ha aludido a la familia del presidente autonómico al argumentar que "el único honesto es el gemelo. Debería aprender del ejemplo ético y moral de su propio hermano", quien ha roto el carné socialista.

El dirigente popular cree que la fecha de l investidura "la ha puesto Puigdemont"

Tras poner en valor las manifestaciones de ayer convocadas por su partido en todas las capitales de provincia, ha defendido que "dos millones de españoles han dicho alto y claro que España no se rinde. Que no se pueden comprar votos a cambio de impunidad ni comerciar con el principio de igualdad. La mayoría silenciosa se ha cansado de ser silenciosa, de tener un presidente postrado ante el independentismo". Y en cuanto a la fecha para el pleno de investidura de Pedro Sánchez del miércoles y jueves de esta semana, según ha comunicado al presidenta del Congreso, Francina Armengol, ha subrayado que la han puesto "desde Waterloo. Es la nueva capital de España, allí se decidirá todo y desde allí se controlará todo, es una nueva humillación".