El PP "no requiere de ninguna mesa de diálogo como la de los independentistas. Si Sánchez ha decidido humillarse, le decimos que con nosotros no cuente para blanquear estas humillaciones". Así se ha manifestado la secretaria general del PP, Cuca Gamarra, respecto a la penúltima oferta de Pedro Sánchez, vehiculada a través de una entrevista en Antena3, de crear una comisión de trabajo con el primer partido de la oposición.

Ha replicado que el método del PP para ese diálogo "va a ser el de siempre, el que merece la democracia", esto es, "en el ámbito de las instituciones y del Parlamento, ni más ni menos". Del mismo modo, Gamarra, que ha asistido hoy a una reunión del comité de dirección del partido en Aragón, se ha comprometido públicamente a que en el mismo momento "en que se pongan en contacto con nosotros informaremos y también el orden del día". Un orden del día en el que quieren incluir, ha advertido, "la amnistía, la defensa de la igualdad de los españoles ante la ley y el resto de cesiones hechas al independentismo. Tenemos derecho a saber -ha agregado- lo que se está negociando y porqué se somete la soberanía nacional al verificador en el extranjero".

El PP asegura no haber recibido ninguna comunicación oficial ni extraoficial de las ofertas de Sánchez

Los populares han recibido con cierto estupor el enésimo anuncio de Pedro Sánchez que les afecta directamente. Tras quejarse ayer de haberse enterado por la prensa de su intención de convocar a Alberto Núñez Feijóo a una reunión antes de fin de año -de la que carecen de "información ni oficial ni extraoficial", se ha quejado Gamarra- este miércoles ha aprovechado otra entrevista para ofrecer al primer partido de la oposición una comisión de trabajo con la que negociar la renovación del CGPJ, la financiación autonómica y la reforma del artículo 49 de la Constitución para eliminar la palabra "disminuido" de su texto.

En Génova echan mano de la ironía al afirmar que "nos plantea una mesa como la que le ha planteado a Junts y a Esquerra" y agregan con sorna que "no ha concretado si esta mesa tendrá lugar en territorio nacional", en alusión a las reuniones que PSOE y Junts celebran en Ginebra con un mediador internacional de la organización Henri Dunant.

Ya más en serio, subrayan que en lo referido a la renovación del órgano de gobierno de los jueces "saben que si no es para cambiar la ley se puede ahorrar la llamada". "No vamos a cambiar de opinión", ha subrayado Gamarra al respecto. Y sobre la reforma del artículo 49 recuerdan que es de sobra conocida la existencia de una "una propuesta avanzada" alcanzada la pasada legislatura entre ambas formaciones políticas pero están a la espera de que el jefe del Ejecutivo "sea capaz de garantizar que su socios no van a pedir un referéndum constitucional".

Votación de la toma en consideración en la ley de Amnistía por llamamiento

Ese fue el gran escollo que impidió alcanzar un acuerdo la legislatura pasada, el temor de que los aliados parlamentarios de Sánchez sumen fuerzas para, bien a través del Senado -donde hay más posibilidades- o del Congreso exigir que dicha reforma que someta a referéndum, lo que abre, temen en el PP, un debate general sobre la Constitución. En lo que afecta a la financiación autonómica, Gamarra ha dejado claro que se debe debatir en el Consejo de Política fiscal y Financiera.

Además, los populares van a pedir que la votación del próximo martes para la toma en consideración de la Ley de Amnistía sea por llamamiento para que se retraten todos y cada uno de los diputados socialistas. Lo previsible es que se rechace dicha propuesta por la Mesa del Congreso y Junta de Portavoces, aunque este tipo de peticiones tienden a apretar aún más las filas en los Grupos Parlamentarios.