"Vienen con un discurso manipulado, no tienen ningún interés en conocer nuestro modelo, quieren hacer partidismo de derechas". Así saludaba la portavoz de la Generalitat, Patricia Plaja, la misión del Parlamento Europeo que esta semana estudia el sistema de inmersión lingüística en la escuela catalana y sus consecuencias para los alumnos que tienen el castellano como lengua materna. El Govern oficializaba así su oposición a la misión del Parlamento Europeo que ya había sido denostada previamente por la consejera de Educación, Anna Simó, y el líder de Junts, Carles Puigdemont. El independentismo en bloque ha reaccionado

Los seis eurodiputados comandados por la liberal estonia Yana Toom completarán este miércoles una intensa agenda que les ha llevado a visitar dos centros educativos en el cinturón de Barcelona, y entrevistas con los peticionarios, Simó, representantes de la Justicia, el sindicato de profesores, la Síndica de Greuges y la Alta Inspección de Educación. Pero el Govern ha cuestionado desde la selección de los centros visitados -ambos en el Prat del Llobregat, una localidad de mayoría castellano parlante, y en uno de ellos se aplica el 25% de castellan- a la composición de la misión, de la que se han descolgado los socialistas, tras la renuncia en el último minuto de la eurodiputada del PSOE Cristina Maestre.

"Vienen a hacer demagogia a costa de nuestros niños y adolescentes"

"Vienen a hacer demagogia a costa de nuestros niños y adolescentes" denunciaba Plaja este martes, tras la reunión del ejecutivo autonómico. "El Govern tiene claro que la misión de eurodiputados no viene a hacer una visita rigurosa ni a interesarse por la situación, sino usar recursos del Parlamento Europeo de forma partidista para intentar desacreditar el modelo de escuela catalana".

Plaja reproducía así los argumentos utilizados previamente por Puigdemont, quien se ha dirigido a la presidencia de la Mesa del Parlamento Europeo para cuestionar la misión, aprobada en la Comisión de Peticiones, que preside la popular Dolors Montserrat. El dirigente independentista ha exigido que se publique "un estudio detallado de los costes" de una misión que tacha de "ilegítima" cuyo único objetivo es "desprestigiar a la escuela y la sociedad catalanas".

Simó -quien lamentó que los diputados europeos aterrizarán en Barcelona "como si fuera a hacer a las Américas para combatir la maldita inmersión"- se entrevistó este martes con los eurodiputados durante 45 minutos. Una muestra, según Plaja, del "pleno respeto institucional" de la Generalitat a la misión del Parlamento Europeo.

En este contexto, la portavoz de Cs en el Parlament, Anna Grau, atribuía las descalificaciones del independentista al "miedo a que queden expuestas sus vergüenzas". Grau cuestionó además la ausencia de los socialistas en esta misión como "una muestra más de la sumisión política al independentismo, otro peaje" por los apoyos de ERC y Junts en el Congreso. Y concluyó que los socialistas "se han quitado de en medio para evitarse el bochorno de la escalada de descalificaciones" a los eurodiputados.