El lehendakari Iñigo Urkullu ha exprimido los plazos al máximo. Tanto, que la espera para conocer la fecha de las próximas elecciones autonómicas se empezaba a hacer muy larga para todos los partidos. La incógnita la desvelará esta tarde tras el Consejo de Gobierno que ha convocado y después del cual comparecerá ante los medios de comunicación para dar a conocer la convocatoria. Desde hace días entre los partidos políticos se maneja una fecha, el 21 de abril, como la más probable.

Urkullu había insistido en que debía agotar el calendario legislativo que se había fijado. En el pleno de la pasada semana el PNV y el PSE dieron por completado su programa de gobierno. La aprobación de las tres últimas leyes previstas -ley de Infancia, 'ley trans' y ley de cooperación- dio por completado este apartado. El otro de los ejes que se había marcado para dar por finalizado el mandato era la firma de la transferencias comprometidas con el PSOE: Cercanías, homologación de títulos extranjeros y acogida de inmigrantes. El acuerdo está prácticamente cerrado y está previsto que se anuncie próximamente.

Urkullu dará a conocer la fecha después del encuentro que el pasado lunes mantuvo en el Palacio de Ajuria Enea con los líderes del PNV, Andoni Ortuzar, y del PSE, Eneko Andueza. Una reunión que sirvió de balance de la legislatura y del acuerdo de coalición mantenido por ambas formaciones. Tanto el PNV como el PSE valoraron de manera muy positiva la sintonía y el entendimiento alcanzado como miembros del Gobierno vasco.

Semana Santa y San Prudencia

El fallecimiento de su madre el pasado martes ha alejado a Urkullu de la actividad política en los últimos dos días. El Consejo de Gobierno que debía celebrarse el martes se suspendió, dejando pendiente de aprobación el decreto por el que se renovará el Plan de Normalización del Euskera. La nueva norma, que actualiza la que está en vigor desde 1997, se aprobará esta tarde.

El anuncio de convocatoria electoral se llevará a cabo según el protocolo establecido y que pasa por comunicarlo en primer lugar a los integrantes del Ejecutivo. Posteriormente, y para que el anuncio se oficialice con los preceptivos 54 días, deberá ser publicado en el BOPV el próximo martes, si, como parece, la fecha elegida por Urkullu es el 21 de abril. En los últimos días, preguntado al respecto, el lehendakari aseguró que hacía días que tenía elegida la fecha para los comicios pero que su celo para darla a conocer buscaba evitar filtraciones.

En 2020 la fecha de las elecciones prevista fue el 5 de abril, si bien a causa de la pandemia finalmente se aplazó hasta el 12 de julio. Ahora, la elección de la fecha vendría condicionada por la Semana Santa y por la festividad de San Prudencia, con gran arraigo en Alava. En el País Vasco, al contrario que en las mayorías de las comunidades autónomas, la semana de Pascua, del 1 al 7 de abril, es festiva en los centros escolares. Este hecho complicaría la celebración de una campaña electoral. La elección del 21 de abril permitiría desplazar el inicio de la campaña al 8 de abril. De este modo también se salvaría la coincidencia del periodo electoral con la fiesta de San Prudencia, el 28 de abril.

Con este anuncio Urkullu podrá fin a tres legislaturas como lehendakari del Gobierno vasco. Accedió al cargo en 2012 tras el mandato de Patxi López que relegó por primera vez al PNV a la oposición. Ahora su partido ha apostado por una renovación generacional y situar a Imanol Pradales como su candidato. Un relevo generacional que también han aplicado desde EH Bildu, colocando a Pello Otxandiano como candidato y el PSE con Eneko Andueza, su secretario general como aspirante. En el PP será Javier De Andrés quien encabezará la lista. En el espacio más a la izquierda Podemos y Sumar concurrirán por separado, el primero de ellos con Miren Gorrotxategi como candidata y en el caso de la marca de Yolanda Díaz con Alba García.