En nuevos informes de la Unidad Central de Operaciones (UCO), a los que ha tenido acceso El Independiente, se refleja que la trama de Koldo García y el empresario Víctor de Aldama, hacían negocios derivados de la contratación de pruebas serológicas en los meses más álgidos de la pandemia del coronavirus. Y se refleja que había un contacto permanente con el Ministerio de Transportes, instancias dependientes y el entorno del exministro, José Luis Ábalos. Sería una derivada más de las operaciones con material sanitario, caso del suministro de mascarillas, que se habrían hecho a Puertos del Estado o Adif.

La UCO menciona diversas conversaciones de chat que se habrían extraído tras el requisamiento de dispositivos móviles derivados de los registros de las viviendas de los implicados. En concreto, se alude a tres personas, que estarían vinculadas con el laboratorio Megalab. Son César Moreno García, Javier Serrano Costumero -alias Javoto Hype-, e Ignacio Díaz Tapia -alias Nacho flashaback-. En un primer diálogo del grupo de WhatsApp denominado 'Fertinvest', el 20 de mayo de 2020, Díaz Tapia menciona haber conseguido la adjudicación a dedo, remarcando que es "la primera" que logran, para proceder a hacer test de antígenos a los empleados de la empresa INECO. A cambio, se embolsarían, menciona, 18.500 euros. Ésta es una empresa pública española de ingeniería y consultora de Transportes.

El aparente aproximamiento al entorno de Ábalos comienza a extenderse en los meses posteriores. En otra conversación del 5 de agosto de 2020, Díaz Tapia reenvía dos mensajes de De Aldama, que se perfila como intermediario de ambos círculos. Éste comparte lo que le dice el empresario: "Ya he pasado tu teléfono a Ricardo, el jefe de Gabinete y os van a dar cita en Málaga para ir a verles. Cualquier cosa vamos hablando y sobre el patrocinio me dices si te gusta así o le damos alguna forma más". En un segundo mensaje, Díaz Tapia reenvía otro texto: "Lo tienen claro y tienen que hacer algo rápido. Hoy te llama Koldo, que es el asesor personal del ministro y para organizar yo creo que será la semana que viene. Hablo con él y te digo".

Sin apuntarse si la referencia vuelve a ser INECO o se trata de un tema independiente, se introducen nuevos elementos que cierran más la relación entre los miembros de la trama y Ábalos. Con "Ricardo", De Aldama se dirige a Ricardo Mar, al que el 30 de junio de 2020 el entonces ministro nombró como jefe de Gabinete. El empresario, finalmente, vuelve a ponerse en contacto con Díaz Tapias para anunciar luz verde. "Me acaba de llamar Víctor, que mañana vemos al jefe". Sería en Málaga. Entre tanto, hay una petición para solucionarle un problema: una empleada del hogar ha dado positivo, y se requieren al menos una quincena de pruebas serológicas para ella, el equipo de Ábalos, él, Koldo y su seguridad. Megalab no puede hacerse cargo por no tener filiales allí, y finalmente contactan con un médico marbellí para que proceda. Esta gestión se pide y se hace con "máxima discreción".

PCR en el Ministerio y un informe falso

El 25 de agosto de 2020, la petición sobrepasa lo doméstico. Tras mencionarse otra conversación paralela -de la que se anuncia que se remitirá "pantallazo" a continuación- con Sanidad y el presidente canario Ángel Víctor Torres, Díaz Tapia dice: "necesitan que alguien haga seis PCR en el Ministerio de Transportes". Y pregunta quién puede ir con él, para tomarle los datos para el acceso. Por entonces, tal y como refleja la UCO en sus informes y según la documentación oficial que tiene en posesión el juez Ismael Moreno de la Audiencia Nacional, Soluciones de Gestión y Ayuda a Empresas SL está, junto a Ferrovial vía UTE, optando a la adjudicación de Sanidad para el abastecimiento fijado en el Acuerdo Marco propuesto por el ámbito de Salvador Illa. De hecho, lo consiguen: para lotes 8 y 9, como se detalla. Son, en concreto, para la compra de mascarillas FFP2 y FFP3.

De hecho, de manera posterior, el 30 de noviembre de 2020, la trama se hace eco de una publicación de Vozpópuli en la que se indica que Sanidad "incluye" al proveedor de confianza de Ábalos. Eso genera cierta incertidumbre.

Entre medias de las otras conversaciones, se comenta el concurso. Díaz Tapia manda otro audio ese mismo día: "César van a ir a dejar unas muestras de las máscaras esas que vamos a ir con Ferrovial para el concurso, las van a dejar ahora. Luego me paso a por ellas, gracias". En esta derivada que confluye con el caso mascarillas, se incorpora, a continuación, un mensaje de WhatsApp independiente entre el trabajador de Megalab y el entonces director del Servicio Canario de Salud, Antonio Olivera, a quien se le reclama contacto. Él responde con un "ahora te llamo, Nacho".

Ya a mediados de octubre, Díaz Tapias avisa a Moreno por texto de que va a ir con Koldo García a ver como se pueden dar de alta a Megalab como "bróker de medicamentos". Es decir, para convertirse en distribuidora e intermediaria. Hay que recordar que ya De Aldama tuvo un negocio a medias con otro socio en este sector, con Telefarmacia APP, que fue declarada ilegal por las autoridades sanitarias en 2019 y luego por la justicia. Pero Moreno le remite un documento del Registro de Entidad de Intermediario de Medicamentos. El día posterior Díaz Tapias da por cerrado el proceso y le invita a esperar una semana para que se oficialice.

La conexión con Ábalos y Transportes se vuelve a producir, al menos en lo que se contempla en el sumario, el 18 de noviembre. Un día antes de que el ministro viaje a Canarias en la tarde del jueves por agenda oficial, en relación a la ola migratoria que sacudía a las islas. Nuevamente, Díaz Tapias da el aviso y traslada que le piden [en principio De Aldama] un informe negativo para Ábalos y Koldo" en referencia a una prueba PCR. Algo que era necesario para viajar por entonces. En 20 minutos, y tras aportarse por mensaje nombres y DNI de ambos, se proporciona el documento. De todos modos, se solicita cuatro pruebas, se sugiere que para Ábalos y su familia, en la mañana del jueves, a las 9:45 horas.

Un viaje con polémica

En ese viaje oficial, según relatan varias publicaciones consultadas por El Independiente, tras la salida de Ábalos del Ministerio, se empezó a cocer su marcha. El dirigente socialista, por entonces también número 'tres' del PSOE y secretario de Organización, se trasladó con su familia. Se apunta a que quería "pasar más tiempo con su familia". Así lo indica ABC, por ejemplo. En un clima difícil, de rescate a personas migrantes y de cerrojazo a la movilidad, Ábalos se habría trasladado a Gran Canaria a un hotel de lujo para pasar ese fin de semana, ya sin actos programados. Habitaciones para la familia, Koldo, su jefe de Gabinete y para la seguridad. Ábalos apuntaría esos días extras por la finalidad de ir a ver las obras de ampliación del aeropuerto Reina Sofía en el sur de Tenerife el domingo.

The Objective apunta a que en ese viaje García pagó gastos elevados como "champán Moët & Cahndon y un masaje", por un precio de 1.800 euros. Y con billetes de 500 euros. Asegura que en Ferraz se encontraron algunos cargos a cuenta del partido. Otros "se dividieron y una parte se pasaría al Ministerio y la otra la pagarían de sus bolsillos". De esto, no hay mención en el sumario. Públicamente, el desglose de gastos para Transportes es el siguiente, y el único que consta: 7.150,34 euros dividido en traslado (4.819,74), alojamiento (2.155) para el ministro y su equipo -no se menciona nadie más-, y 175,6 en manutención.