No habrá un relevo exprés dentro de Sumar tras la renuncia de Yolanda Díaz como coordinadora general. Un puesto en el que Díaz ha desarrollado su actividad oficiosa desde finales de marzo, al término del primer trámite asambleario para la configuración del movimiento como partido. De la dilatación de tiempos dejan constancia sectores de Sumar, que descartan que este jueves, en la primera reunión de la Ejecutiva programada para abordar esta sucesión y replanteamiento interno, vaya a haber un consenso y una decisión final.
Apuestan por ir pausadamente para valorar el escenario en el que se encuentran y las propuestas de los integrantes de esa Ejecutiva, en la que no se integraron ni IU, ni los comunes, ni Más Madrid en la configuración de finales de abril. Los motivos fueron las propias elecciones catalanas, en el caso de los comunes, y el descontento que conllevó la elaboración de listas europeas con los de Antonio Maillo y el partido de Mónica García. No está claro si asumirán sus puestos reservados para abordar esta cuestión. Internamente hay un llamamiento a replantear el modelo de partido que quieren ser y los retos a los que mirar, para dejar de lado el colchón sobre el que se han construido. Sobre los restos de Unidas Podemos y los antecesores del espacio.
Algo que forzó, notablemente, el adelanto de generales del año pasado. Lo que se compara con la unión improvisada de la izquierda francesa la noche de este lunes, para parar los pies a Marine Le Pen y su Reagrupación Nacional (RN) en las próximas elecciones legislativas. "No se puede vivir de lo acumulado", se contempla. Además, será fundamental el posicionamiento desde el Gobierno, al que llaman a centrarse en legislar desde ya.
Hay un matiz importante que hacen fuentes de Sumar: no hay que suplir necesariamente a Díaz, algo que debe hacerse por mayoría simple. Al menos inminentemente. Porque "la ejecutiva sigue reuniéndose, tomando decisiones" durante esta etapa interina abierta. En la que "todo sigue igual" y a pleno funcionamiento. La clave es avanzar en la reflexión y en el modelo de partido, exponen, algo en lo que Íñigo Errejón, el portavoz parlamentario de Sumar, insistió en la rueda de prensa protagonizada en el Congreso de los Diputados este martes. En ella se descartó como suplente, después de la reunión de la junta de portavoces. Es más, Errejón la definió como el "mayor activo electoral" del espacio, alejando la posibilidad de que no encabece la papeleta de generales en la próxima convocatoria. Al menos, ahora.
Para más inri, la propia Díaz, a última hora de la tarde confirmó ese deseo: "No me voy, me quedo. Para ganar las próximas elecciones generales". Un empleo similar de las palabras al que hizo Cristina Cifuentes en 2018 días antes de dimitir definitivamente como presidenta de la Comunidad de Madrid, cabe destacar.
En Sumar apremian el debate político sobre los nombres, y no tiene prisas en designar al sucesor orgánico de Díaz
"El proceso va a ser pausado, de reflexión" de los resultados de europeas, que "no son buenos". "Eso no se puede hacer en una semana, ni en ruedas de prensa, canutazos o entrevistas". "Hace falta ver por qué hay esta parálisis" electoral, anticipó Errejón. Un debate, dijo, en el que deben estar todas las fuerzas que componen Sumar y "conversar" entre todos. Igualmente, agradeció a Díaz que anteponga la gestión desde el Ejecutivo, para centrarse en las políticas, sobre su dirección orgánica.
El calendario permite esa reflexión
A pocas semanas de la entrada de julio y del cierre del ciclo de sesiones parlamentario, y sin convocatorias electorales en el frente [de hecho en Sumar descarta que vaya a haber repetición de comicios en Cataluña y auguran gobierno de Salvador Illa con la Mesa controlada por Junts], Sumar ve favorable el calendario. Se agarran a la tranquilidad del verano y a esa vuelta a la cotidianidad política, sin campañas, para resolver este problema interno. "Vamos a aprovecharlo", dicen del contexto.
Con Díaz confirmada como perfil político fuerte al margen de la estructura de Sumar, falta una confirmación sobre el modelo de partido al que aspiran los magentas. Algo que ahora mismo no pueden determinar. Sin grandes valoraciones, no se descarta del todo una especie de bicefalia al estilo del PNV: un presidente o coordinador que no opte a las elecciones. Eso ya lo puso en práctica Ciudadanos con su refundación del año pasado, sin éxito en vista de los resultados. La prioridad, no obstante, es resolver la incertidumbre política y, posteriormente, se centrarán en los nombres. Sumar, por tanto, puede estar hasta finales de año sin liderazgo orgánico y con la Ejecutiva actuando como gestora hasta entonces. Los estatutos de Sumar, cabe destacar, contemplan esa figura, por lo que no puede quedar indefinidamente vacía.
Lo que sí afirman en Sumar es que el calendario actual fijado para otoño deja de tener sentido. Tras la fundación oficial de Sumar en marzo, se fijó a finales de año, entre octubre y diciembre, como el momento para culminar todo el proceso. Ya con las ponencias ética, política y organizativa aprobadas y ejecutadas, y con todos los representantes en sus puestos. A nivel territorial y nacional. Igualmente, planteamientos sobre las sedes y la estructura física, dado que ahora, Sumar depende mayoritariamente de las instalaciones de IU, su músculo geográfico.
Ahora, las demandas de mayor protagonismo desde IU o Más Madrid, tras no ver electos a sus representantes en europeas [IU pide solidaridad a Comuns y Compromís, con la esperanza de repartir el mandato con una futura dimisión para que corra la lista a Manuel Pineda], requieren revisar ese rumbo. Cabe la posibilidad de que todo continúe igual, o se decida repartir el peso orgánico de forma similar, lejos de esa fórmula de 70-30% en favor de los magentas, y que se acepte el peso político, en cambio, de Díaz. Tras un sondeo parlamentario, dicen en Sumar, han comprobado el respaldo que tiene Díaz para ese liderazgo político y también para presidir el Grupo Plurinacional, que tiene carácter simbólico y sirve como nexo con el Gobierno.
De cara al debate, tienen especial protagonismo Más Madrid e IU. Los primeros, en voz de figuras como la portavoz del Ayuntamiento de Madrid, Rita Maestre, han instado a que ese debate se haga mediante una 'Mesa de partidos'. Que juntos se determine el mejor rumbo para salir más fuertes. A eso, fuentes magentas entienden que no se podrán negar y deberán hacerlo. Por lo que se fundamenta las previsiones de trámites largos. Por su parte, IU, en palabras de su coordinador general, Maillo, ha pedido una fórmula "más horizontal". Eso es un peso equitativo en la Ejecutiva y en la toma de decisiones. Desde IU ya se denunció un arrinconamiento antes de la Asamblea. "Hay cosas mejorables, un espacio mucho más horizontal y de igualdad entre todos los actores del proyecto".
Entre las demandas de Maillo, para avanzar a ese espacio común de igualdad de condiciones está que, además, se contacte y retome las alianzas con Podemos. Algo que Errejón descartaba este martes, pidiendo que el debate gire entre las fuerzas que mostraron compromiso el 23-J. Tampoco muestran entusiasmo fuentes de Podemos, que pretenden seguir abonando su espacio "propio". Creen que ha quedado acreditada su fortaleza y pretenden focalizar su actividad a corto y medio plazo en cuestiones internacionales como la guerra en Gaza.
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