"Nos dirán que el referéndum es imposible e inconstitucional, como nos dijeron que era imposible la amnistía, hasta que conseguimos que cambiaran de opinión". El presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, ligó este lunes amnistía y autodeterminación en el Senado para dejar claro que sus reivindicaciones no se acaban aquí. Una advertencia mucho más dirigida al Gobierno del PSOE que a los presidentes del PP que le escuchaban desde los escaños de la Cámara alta, reunidos en la Comisión General de las Comunidades Autónomas.

Nos dirán que el referéndum es imposible e inconstitucional, como nos dijeron que era imposible la amnistía, hasta que conseguimos que cambiaran de opinión", aduce el 'president' Aragonès

Aragonès era el único presidente autonómico que acudía al debate en defensa de la ley de amnistía. Una participación que se circunscribe de pleno en la campaña de las elecciones autonómicas catalanas del 12 de mayo. Y que el propio Aragonès anunció asegurando que iba al debate para "trolear" al PP. Nadie del Gobierno fue a la Cámara alta: el mismo plantón que ocurrió en octubre, cuando los populares llevaron a la misma comisión el debate sobre la medida de gracia, antes incluso de la investidura de Pedro Sánchez.

"La amnistía es inevitable, como lo serán la financiación singular y el referéndum", añadió el presidente catalán, que abrió su turno con una andanada a sus rivales socialistas en Cataluña. "Hoy estamos aquí porque hemos llegado a la fase final de la amnistía que dijeron que no era constitucional, no va a haber amnistía ni autodeterminación, gritaba Miquel Iceta, lo mismo que ha dicho Salvador Illa", recordó Aragonès, apuntando también tanto a ministros como a líderes del PSOE y el PP.

A Pedro Sánchez le dedicó un recuerdo especial, señalando que justo antes de la cita con las urnas del 23-J, el socialista aseguró que los independentistas "pedían amnistía y referéndum pero no han tenido amnistía ni tendrán referéndum". Pese a lo cual la amnistía enfila la recta final de su trámite parlamentario. "Antes o después el referéndum será constitucional", concluyó.

Piropo a Aznar

En este contexto, Aragonès no tuvo empacho en asegurar que "quien lo entiende mejor" es el expresidente del Gobierno José María Aznar, cuando enumera las cesiones del PSOE al independentismo y concluye que la amnistía "legitimará" el referéndum del 1 de octubre de 2017. La amnistía "es la victoria de la Cataluña libre que queremos", aseguró el president.

El líder del Govern insiste en que la amnistía es "reconocer" que "nada" de lo que hicieron los separatistas era ni es "delito"

El perdón legal pactado por independentistas y socialistas "es la enmienda a una sentencia injusta y a la ilegitimidad de la represión policial, es aceptar que democracia nunca puede ser delito", añadió, dejando en agua de borrajas las promesas de reconciliación y de "pasar página" de los socialistas.

Para Aragonès, y el conjunto del independentismo, en el 1-O "el Estado se puso en evidencia ante el mundo enviando a la policía a impedir a golpes de porra que personas normales votaran", y eso es lo que intenta reconducir el PSOE con el perdón. El objetivo, proclamó Aragonés, es "poner fin a una represión que sigue, poner fin a los exilios de Carles Puigdemont, Marta Rovira y Rubén Wagensberg, a las amenazas de prisión e inhabilitación y reconocer que nada de lo que hicimos era ni es delito; ese es el significado de la amnistía".

Financiación singular

Aragonès dejó claro, sin embargo, que su prioridad ahora es la "financiación singular para Cataluña, entendida como un nuevo marco de financiación autonómica que ceda a la Generalitat la recaudación y gestión de todos los impuestos, así como manos libres para la regulación de los tributos en el ámbito catalán.

Aragonès exige un sistema de financiación "justa" para Cataluña mientras no logre la independencia

En la "nueva etapa" que debe abrir la aplicación de la amnistía, Aragonès advirtió de que "en paralelo a la negociación del referéndum", se tiene que "hacer posible un sistema de financiación justa para Cataluña". El catalán lo defendió señalando al resto de los presidentes autonómicos: "Ninguno de ustedes aceptaría ser los terceros en aportar y los decimocuartos en recibir".

"Mientras no seamos independientes, Cataluña debe tener un sistema de financiación singular" en el que "gestionemos y liquidemos todos impuestos, podamos decidir sobre tributos, acordar coste de servicios del Estado y una cuota de solidaridad", concluyó. Hacienda ya ha rechazado esa exigencia de ERC, el cupo catalán, aunque sí está dispuesta a inyectar más recursos para Cataluña para financiar sus competencias extra.

"Trabajando codo a coda con Illa"

El Gobierno ya había respondido la semana pasada a Aragonès después de que él presentara su plan para un referéndum pactado en Barcelona. Este lunes, lo hizo, desde Ferraz y en rueda de prensa, la portavoz del partido, Esther Peña. Obviamente, en la misma línea. La que ha venido manteniendo todo este tiempo el PSOE: "Los socialistas hemos sido tajantes a este respecto. Ni hay ni habrá referéndum. Esas fórmulas divisivas pertenecen al pasado. Los socialistas estamos trabajando codo a codo, además, con Salvador Illa, para construir un futuro en Cataluña de grandes acuerdos y convivencia. Un futuro mejor para España y Cataluña sin fracturas y para todos".

Los socialistas estamos trabajando codo a codo, además, con Illa para construir un futuro en Cataluña de grandes acuerdos y convivencia. Un futuro mejor para España y Cataluña sin fracturas y para todos", señala la portavoz del PSOE, Esther Peña

Las palabras de la portavoz reiteraban, por tanto, la doctrina oficial del PSOE y del Ejecutivo, que semana tras semana afrontan preguntas del mismo tipo precisamente por la insistencia de los independentistas en el referéndum y en que será posible, como lo era la amnistía de la que tanto abjuraban en el PSOE. Pero partido y Moncloa también han venido recalcando que la medida de gracia que pedían los separatistas poco tenía que ver con la proposición de ley que ahora tramita el Senado y que encaja, a su juicio, en la Constitución. Y el referéndum, además, sí que no conecta con la política de Sánchez, han alegado los socialistas: si la amnistía continúa la estrategia de distensión que tuvo en los indultos a los líderes del procés un momento clave, la consulta soberanista es una vuelta al pasado, creen, que solo fractura a la sociedad y no repara la convivencia.

En opinión de Peña, el "circo" que quería montar el PP en el Senado este lunes ha quedado "deslucido", pues ha "faltado plantilla presidencial del PP": solo acudieron seis barones —Isabel Díaz Ayuso (Madrid), Carlos Mazón (Valencia), Jorge Azcón (Aragón), Fernando López Miras (Murcia), Alfonso Fernández Mañueco (Castilla y León) y María Guardiola (Extremadura)—, de los 11 que dirigen comunidades autónomas. Para el PSOE, lo que han hecho los populares con la sesión de este lunes en la Comisión General de las CCAA en la Cámara Alta es ofrecer "una plataforma electoral para el candidato Aragonès" antes de las catalanas del 12 de mayo.

La portavoz de la ejecutiva del PSOE, Esther Peña, al término de su rueda de prensa ante los medios, este 8 de abril de 2024 en la sede de Ferraz. FLICKR PSOE / EVA ERCOLANESE

Los socialistas insisten en que el PP trate de convertir el Senado, una vez más, en una Cámara "al servicio" de los intereses del partido, cuando no lo es. "Lo que ha sucedido hoy es que el PP ha decidido birlar a los españoles una institución", dijo. Peña pidió "un poco más de decoro y respeto" a los trabajadores del Senado y a los representantes institucionales. El PSOE, aseguró la portavoz, cree que el PP ha convertido la sesión en un "pseudodebate" de la amnistía, en el que no se han atendido siquiera los argumentos de la Comisión de Venecia, que ya dijo, recordó, que la proposición de ley aprobada por el Congreso —y ahora en trámite en el Senado— "no vulnera la igualdad de los españoles y la separación de poderes", y estableció que el proceso era "reglamentario". El "ruido", finalizó, "hace un flaco favor al PP".