La Rioja es uno de los territorios donde los populares no sólo están convencidos de ganar el 28-M sino también de sumar los suficientes apoyos para regresar al ejecutivo regional. De hecho, fuentes de Génova aducen que "nunca se debiera haber perdido" en una Comunidad gobernada ininterrumpidamente durante 24 años por el PP, hasta que en 2019 la socialista Concha Andreu se hizo con las riendas del gobierno autonómico gracias al apoyo de una diputada elegida en las listas de Podemos y otra en las de Izquierda Unida.

Pero ese convencimiento del PP de que es posible dar la vuelta a la situación, corre peligro con la irrupción electoral de una nueva formación política liderada por un crítico salido de sus propias filas. Se trata de Alberto Bretón, quien aspiraba a encabezar la lista popular a la presidencia regional y terminó desplazado por Gonzalo Capellán, impuesto por Alberto Núñez Feijóo y la riojana, ex alcaldesa de Logroño y secretaria general del PP, además de portavoz en el Congreso, Cuca Gamarra.

Partido de nueva creación

Y es que Bretón ha creado junto a otros descontentos del PP y con críticos provenientes del Partido Riojano una nueva formación política para concurrir a las elecciones autonómicas del 28 de mayo, Por La Rioja, con la que, independientemente de que saque representación o no, puede arañar los votos que necesite Capellán para alcanzar una mayoría de gobierno. En todo caso, lo más probable es que Bretón encabece la lista por el ayuntamiento de Logroño donde hace falta sólo un 3 por ciento para conseguir representación. Desde el PP nacional admiten que multiplicar la oferta de centro-derecha "no va bien" para las opciones de este bloque, aunque creen que Bretón puede hacer más daño al Partido Riojano.

La principal debilidad de la actual presidenta autonómica es que le fallen sus socios, sobre todo Podemos, que da muchos signos de desgaste y corre el riesgo de quedarse sin representación en el parlamento riojano. En todo caso, su consejera de Igualdad, Raquel Romero, fue expulsada de la formación morada por no donar parte de su sueldo al partido. Por ello, la división del voto de centro-derecha no deja de ser una buena noticia para incrementar sus opciones de reelección.

Bretón criticó que se impusiera un candidato desde Madrid sin celebrar congreso regional, situación que se da en muchos otros territorios como País Vasco y Cataluña, cónclaves postergados, como pronto, a después del 28-M si es que no se retrasan más allá de las generales de fin de año, aunque, en su caso, no celebran autonómicas el 28-M. Génova aduce que, estatutariamente, le corresponde a la dirección nacional el nombramiento de los candidatos autonómicos y a capitales de provincia, sobre todo en aquellos sitios como La Rioja donde el partido estaba inmerso en una crisis interna.