Apple ha resumido la principal novedad de sus nuevos iPhone con un vídeo que no deja lugar a dudas. Una persona pasea por la calle, le llama la atención un restaurante. Saca su iPhone, apunta al local y solo con pulsar el nuevo botón situado en el lateral derecho del teléfono, consigue que este busque en internet sus horarios, reseñas y vías de contacto para hacer una reserva. Más adelante, el mismo hombre ve el cartel de un concierto que le podría interesar, así que vuelve a sacar el móvil y a pulsar el mismo botón, lo que hace que se active la cámara y que el navegador muestre automáticamente qué concierto es, dónde va a suceder y dónde comprar las entradas.
La secuencia se repite en tres situaciones más: la misma persona se encuentra a un perro que le gusta y gracias a la inteligencia artificial de su iPhone consigue saber de qué raza es, y cuando se topa con una bici que le interesa, logra saber marca y precios con solo apuntarla con el móvil. Pasa muy parecido cuando enfoca a la página de un libro de texto que no termina de entender: el teléfono le sugiere que chat GPT le haga un resumen para así ahorrarle tiempo y esfuerzo.
Esto es lo que Apple ha bautizado como "visual intelligence", inteligencia visual o, en definitiva, una inteligencia artificial integrada en las cámaras de sus teléfonos que cuentan con el sistema operativo iOS 18. Lo cierto es que esa función concreta se parece mucho a algo que ya existía, y con lo que también contaban los teléfonos Android a través de la aplicación llamada Google Lens, pero que ahora la multinacional con sede en Cupertino ha trasladado al hardware de sus móviles para que ni siquiera haya que pulsar en la pantalla cuando el usuario quiera conocer más sobre algo de lo que lo rodea.
"Control de cámara sirve para ayudarte a aprender sobre lo que te rodea y obtener respuestas a tus preguntas más rápido que nunca. Llegará próximamente este año", ha explicado en la presentación del evento Craig Federighi, vicepresidente de software de Apple. La multinacional anuncia cada mes de septiembre sus novedades en una gran presentación que raramente suele cumplir con las expectativas del mercado y de los expertos -un problema más de las expectativas que de las novedades en sí-. En esta ocasión ha vuelto a suceder lo mismo: se esperaban novedades mucho más potentes que las desveladas, pese a que estas no sean poca cosa.
Esta vez, Apple ha parecido entender de una vez por todas que sus clientes no necesitan teléfonos más grandes, ni con más almacenamiento o mayor resolución de pantalla, sino que el foco debe estar en que les hagan la vida más fácil. Por eso los nuevos iPhone se parecen mucho a los anteriores en lo que a aspecto se refiere. Por supuesto incluyen mejoras sustanciales en sus cámaras, procesadores y baterías, pero por una vez hay mucho más aparte de eso. Y esas mejoras pueden encontrarse en los iPhone 16, que llegarán en cuatro modelos distintos.
Además, Apple ha presentado su nuevo reloj inteligente, el Apple Watch Series 10, más sofisticado, delgado y elegante (por 399 dólares, unos 361 euros) y unos nuevos auriculares, los AirPods Pro 2, que podrán utilizarse como audífonos para las personas con problemas de audición. También incorporan cancelación de ruido automática y detección de conversación, de manera que el usuario no tenga que quitárselos cuando alguien le hable mientras los utilizan (249 dólares, unos 225 euros).
Volviendo a los nuevos teléfonos, la inteligencia artificial también puede encontrarse en ellos de muchas otras maneras. Apple ha reproducido -desde la pandemia la presentación consiste en mostrar un vídeo ya grabado, en lugar del habitual show en directo- algunos ejemplos para que se entienda mejor. Si el usuario recibe un mensaje en el que un amigo le anime a escuchar un disco de música, este podrá reproducirse automáticamente con un click. La misma IA permitirá revisar ortográficamente textos, o unirá fotos en álbumes de forma automática para que sea más cómodo revisarlas y recordarlas. Esto implica que, en algunos casos, el usuario deberá autorizar a Apple a que preste estos servicios a través de terceros, por ejemplo Chat GPT, pero la compañía insiste en que en todos los casos se encargará de garantizar la seguridad que la caracteriza.
Siri, la asistente de voz de los teléfonos iPhone, se apunta también a esas mejoras, y en teoría podrá entender mejor cuando alguien le solicite cualquier cosa, incluso cuando la persona titubee, se trabe o reformule su pregunta sobre la marcha. Esta novedad concreta será interesante de probar en vivo y en directo, puesto que hasta el momento los diferentes asistentes de voz de las principales compañías tecnológicas están teniendo muchas dificultades para cumplir con la promesa de contestar a peticiones y preguntas simples de humanos -les pasa a los altavoces inteligentes y teléfonos de Google, Amazon y Apple-.
Algunas de estas novedades estarán disponibles el próximo mes, pero solo en inglés. La empresa ha comunicado que el próximo año saldrán en chino, francés, japonés y español. El nuevo iPhone 16, su versión más básica, partirá de los 799 dólares (723 euros al cambio actual, pero hay que recordar que hoy no se ha anunciado precio en España). El iPhone Plus 16 se venderá por 899 dólares (814 euros al cambio); el Pro, a partir de 999 dólares (905 euros) y su versión más grande saldrá a la venta por 1.199 dólares (unos 1.086 euros).
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