El presidente ruso, Vladimir Putin, ha pedido a los soldados ucranianos este viernes que den un golpe de Estado y tomen el poder en el país, derrocando a Volodimir Zelenski y su Gobierno. Putin calificó a los actuales mandatarios de “neonazis” y “drogadictos” según la agencia francesa AFP.

"Tomen el poder en sus manos. Me parece que será más fácil negociar entre ustedes y yo", dijo Putin al ejército ucraniano en un discurso transmitido por la televisión rusa, afirmando que no luchaba contra unidades del ejército, sino contra formaciones nacionalistas que se comportaban "como terroristas" utilizando a los civiles "como escudos humanos".

El presidente ruso ha afirmado que no combate a unidades del ejército sino a formaciones nacionalistas que se comportan "como terroristas" usando a "Parece que para nosotros será más fácil negociar con ustedes que con esta pandilla de drogadictos y neonazis de Kiev que han tomado a todo el pueblo ucraniano como rehén", ha añadido el mandatario en una intervención retransmitida por la televisión rusa y también recogida por la agencia TASS.

Putin, además, ha aprovechado para "elogiar la eficacia de las Fuerzas Armadas rusas, han estado actuando de manera honorable y heroica para proteger al pueblo ruso y su patria".

El discurso tiene lugar después de que la Presidencia de Rusia mostrara este viernes su disposición a enviar una delegación de alto nivel a la capital de Bielorrusia, Minsk, para mantener conversaciones con Ucrania, un día después del inicio de la ofensiva.

"En respuesta a la petición del presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, estamos dispuestos a enviar representantes del Ministerio de Exteriores y la Presidencia para unas negociaciones", ha dicho el portavoz del Kremlin, Dimitri Peskov, según ha informado la agencia rusa de noticias Sputnik.

Horas antes, Zelenski ofreció a Putin este proceso "para detener la muerte de personas", poco después de que uno de sus asesores afirmara que Kiev está dispuesto a negociar un estatus "neutral" si, a cambio, recibe garantías de seguridad por parte de Moscú, tal y como recogió la agencia ucraniana de noticias UNIAN.