Los ciudadanos británicos llevan días volcándose en los actos por la muerte de Isabel II. Este lunes se está celebrando el funeral en Westminster y se calcula que dos millones de personas han salido a la calle para seguir el camino del féretro hasta la abadía.

Muchos de los asistentes se han mostrado desolados y algunos han llorado al paso de la reina más longeva de Inglaterra por las calles de Londres. Otros muchos lo están siguiendo por televisión desde sus casas.